SANTO DOMINGO. La vinculación de políticos de los diferentes partidos en escándalos de corrupción podría llevar a sepultar a un sector de la clase política dominicana y a generar una oportunidad para que la democracia adquiera calidad.
El planteamiento lo hacen los politólogos César Pérez y Rosario Espinal, junto al especialista en asuntos políticos, Iván Ogando, quienes advierten sobre una progresiva erosión de la credibilidad en la política.
A decir de Pérez, desde hace un tiempo relativo largo, el sistema de partidos discurre con significativa dificultad.
Mantiene la teoría de que los escándalo de Odebrecht y otros más pueden trazar un antes y un después en el sistema político dominicano, “pues se llevará de paro a no pocos miembros de la clase política y la recomposición del liderazgo político, de manera subitánea, como suelen ocurrir muchos hechos en la actualidad, es algo realmente posible, además de deseable”.
Afirma que los diferentes escándalos que sacuden el país, e involucran a políticos, son los de mayores trascendencia en las ultimas 3 o 4 décadas.
“Es una oportunidad para que la democracia dominicana adquiera una calidad de la cual ha carecido por la existencia de una clase política descaradamente corrupta y que ha montado una estructura de corrupción e impunidad como ninguna otra en todo el continente”, apuntó.
De su lado, Espinal considera que en República Dominicana la corrupción ha sido sistémica y endémica, por cuyas razones el sistema de partidos ha podido sobrevivir.