SANTO DOMINGO.- Una parte de los sobornos pagados por Odebrecht en el exterior pasó a través de la cuenta en Suiza del publicista João Santana, según publica el diario brasileño O Globo.
Mensajes intercambiados entre Joao Santana y el administrador de sus cuentas del Bank Shellbill, muestran que la misma cuenta que recibió dinero en efectivo para la campaña de la ex presidenta Dilma Rousseff también recibió recursos de al menos otros tres países: República Dominicana, Angola y Panamá.
El gestor de mensajes cita diez entradas de US$500.000 de la República Dominicana en 2014.
Cuando fue detenido en 2016, Santana estaba asesorando la campaña para la reelección de Danilo Medina, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). En los extractos obtenidos por O Globo, hay registro de 23 envíos por un total de $1.996 millones, originarios de Angola y realizado en 2014, dos años después de que Santana asesorara la campaña del presidente José Eduardo Santos.
En Panamá, una de las compañías de Joao Santana hizo la campaña para el Cambio por el Partido Demócrata, en 2014. El contrato con la empresa fue parte de los documentos enviados por el patrimonio y ayuda a explicar el éxito financiero del publicista.
Esperaba el beneficio de la repatriación
En 2015, cuando la investigación del Lava-Jato había alcanzado ya los pagos a las campañas políticas, João Santana esperaba la aprobación de la ley de repatriación para legalizar el dinero guardado en Suiza.
Al mismo tiempo en que los hallazgos fueron avanzando en Brasil, Santana aumentaba sus recaudaciones, pero necesitaba demostrar el origen de los fondos que manejaba, en especial los recibidos entre 2012 y 2014.
El gerente dice que Santana hizo un gesto con la retirada de dinero del banco, aprovechando la ley de repatriación en Brasil, que perdonó a los que tenían dinero no declarado en el extranjero. Esa ley fue promulgada en enero del 2016 por la presidente Dilma Rousseff.
En un mensaje interno, el gerente del Banco relata a sus superiores que estuvo con Joao Santana en octubre del 2015 en Sao Paolo, y que el publicista “estaba convencido de aprobación” de la ley de amnistía fiscal, que se presentaría al Congreso.