Empresario habría pagado soborno excluido de acusación

La jueza de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste, Leonarda Quezada, aplazó para mañana a las 2: 00 de la tarde la medida de coerción contra el exdirector de la Oficina Metropolitana de Servisios de Autobuses (Omsa), Manuel Rivas; su director financiero, el coronel de la Policía Naciona Faustino Rosario Díaz, y de José Antonio Mercado Blanco, alias El Grande, tres de los acusados por la muerte del abogado Yuniol Ramírez Ferreras.
La solicitud de medida de coerción fue aplazada a pedido de ambas partes. La parte querellante pedía que le fuera notificado el expediente; la defensa de El Grande solicitó el reenvío para que el Ministerio Público aportara unos discos compactos que contienen los videos donde se capta la ruta que hicieron con Ramírez antes de matarlo.
El grupo llegó al palacio de Justicia de Santo Domingo Oeste entradas las 9 de la mañana desde la cárcel de San Luis.
A su salida de ese recinto Manuel Rivas negó haber mandado a matar a Yuniol, quien según el Ministerio Público le extorsionaba amenazándolo con llevarlo a la justicia por su manejo en la Omsa.
Aseguró que él no mandó a hacer eso, que no lo haría ni de pensamiento.
También está acusado por el caso el encargado de compras de la Omsa y asistente del director, Argenis Contreras González, quien está prófugo y quien habría sido la persona que disparó a la víctima.
Yuniol Ramírez, como presidente de la Convergencia Nacional de Abogados (CONA) encabezó acciones contra funcionarios y entidades por supuestos actos de corrupción.
Antes de ser secuestrado y asesinado, este había declarado que el próximo escándalo de corrupción sería el de la Omsa.
Los abogados de las víctimas y familiares de Ramírez Ferreras aseguran que la muerte de este vino porque no se quiso dejar sobornar por los de la Omsa, para que desistiera del caso que pretendía iniciar en la justicia.
Anunciaron que se querellaron contra el empresario y suplidor de la Omsa Eddy Santana Zorrilla, a quien la Fiscalía dejó fuera y aportó como testigo.
El excluido. El propio Ministerio Público narra que Santana Zorrilla fue contactado por Rivas para que llegara a un acuerdo con Ramírez Ferreras, para que este retirara la demanda en solicitud de información de la institución.
A Santana Zorrilla, Rivas le autorizó a que pagara lo necesario para resolver eso, porque necesitaba salir del país.
En un encuentro que coordinaron en un hotel de la capital, el 4 de octubre, es cuando Ramírez Ferreras acuerda retirar la demanda a cambio del pago de 4 millones, dice la instancia de solicitud del Ministerio Público, y establece que se entregó un primer millón de pesos.
“El se lo dio a Argenis para que mate a Yuniol, ese fue el móvil, para que no lo someta, y como Yuniol no aceptó, ellos lo mataron”, explica Ramón Ramírez que hizo Santana Zorrilla, contra quien interpuso una querella.