El régimen norcoreano será “totalmente destruido” si se desata una guerra, advirtió hoy Estados Unidos, que urgió a todos los países a cortar relaciones con Pyongyang tras su último ensayo armamentístico.
“El dictador norcoreano tomó ayer una decisión que acerca al mundo a una guerra, no lo aleja”, dijo la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad.