El capo mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán fue capturado el viernes en Los Mochis, en el noroccidental estado de Sinaloa, tras seis meses de búsqueda, pero no cayó solo: a su lado estaba Orso Iván Gastélum Cruz, “el Cholo Iván”, su jefe de seguridad y mano derecha.
“El Cholo”, también conocido bajo el nombre de Jorge Iván Gastélum Ávila, formaba parte de los 122 objetivos prioritarios del Gobierno mexicano, como aseguró la noche del viernes la fiscal general, Arely Gómez, al presentarlo ante los medios junto a Guzmán.
Gastélum se fugó en agosto de 2009 de la cárcel de Sinaloa en la que se encontraba preso y se cree que también participó en la de Guzmán del penal de máxima seguridad del Altiplano el 11 de julio pasado.
Su fuga se produjo en mitad de una fiesta celebrada por los reos en la que no faltaron los narcocorridos, canciones que ensalzan las hazañas de los capos de la droga.
“El Cholo”, jefe del cártel de Sinaloa en la zona norte, incluso cuenta con uno de estos temas musicales dedicado a su figura, lanzado por Gerardo Ortiz en 2015 en su álbum “Hoy Más Fuerte”.
En 2005, Gastélum había sido detenido junto a varios de sus cómplices por el delito de posesión de armas de fuego.
Entre sus labores se encontraba el contener el avance del cártel de los Beltrán Leyva, enemigo del cártel de Sinaloa o Pacífico.
En concreto, Gastélum era el encargado de frenar a Fausto Isidro Meza Flores, “el Chapito Isidro”, el principal rival de “El Chapo” en la zona conocida como el Triángulo Dorado de la droga en México, formado por los estados de Durango, Chihuahua y Sinaloa.
El nombre de Gastélum saltó a los titulares en noviembre de 2012, cuando el Ejército mexicano acabó, en un enfrentamiento, con la vida de María Susana Flores Gámez, la ganadora del concurso “Mujer Sinaloa”.
Supuestamente, el narcotraficante mantenía una relación sentimental con esta reina de belleza, y en los días posteriores fue el responsable de dirigir diversas amenazas al general Antonio Gurrola Calzada, a quien responsabilizaba de la muerte.
“El Cholo” consiguió escapar el viernes con Guzmán de una operación que las fuerzas federales realizaron en un domicilio de Los Mochis, que se saldó con cinco delincuentes muertos, un marino herido y seis detenidos.
Ambos escaparon por los túneles de drenaje, algo que según la fiscalía estaba previsto en el operativo, pero en un momento salieron del sistema y robaron un vehículo.
Las alertas de robo de automóviles llevaron a las fuerzas de seguridad a buscar en unidades, ubicando a los delincuentes en una de ellas en la carretera Los Mochis-Navojoa.
Los dos detenidos fueron trasladados a un motel de las afueras de la localidad “para esperar refuerzos” y un poco más tarde fueron trasladados al aeropuerto de Los Mochis, desde donde fueron llevados hasta la capital del país, según la versión de la fiscalía.
En la noche del viernes ambos fueron presentados ante los medios de comunicación en el hangar de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) en el aeropuerto capitalino antes de trasladarlos en helicóptero hasta el penal del Altiplano, en el central Estado de México.
