SANTO DOMINGO. El 479 aniversario de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) encuentra a esa academia bajo cuestionamientos en torno a la seguridad dentro del campus, falta de mantenimiento de sus instalaciones y carencias de recursos.
Pese a que han sido cuantiosas las inversiones en obras de infraestructura en los últimos años, la impresión que dan muchas de las edificaciones de la UASD es de un descuido que va desde la pintura hasta el estado de sus baños, puertas, ventanas y mobiliario.
Los casos más críticos se registran en la Escuela de Deportes y el polideportivo Tony Barreiro, donde las aulas y los lugares de práctica de distintos deportes reflejan un progresivo estado de deterioro.
A eso se suma la arrabalización que representan las llamadas “Embajadas” que agrupan a estudiantes de distintos pueblos y carreras universitarias, las cuales se han levantado sin ningún tipo de planificación y muchas dificultan la circulación a pies por el campus uasdiano.