Estados Unidos afirmó hoy que en las últimas semanas ha destruido alijos de droga por valor de 50 millones de dólares, 15 días después de que las tropas estadounidenses y afganas atacaron por primera vez, en colaboración, fábricas de procesamiento de narcóticos de los talibanes.
“Sólo en las últimas semanas hemos destruido drogas por valor de 50 millones de dólares en Afganistán que son la fuente de financiación de los talibanes y estamos yendo a por ellas”, dijo en Kabul el comandante de las tropas de EE.UU. y la OTAN en el país, general John Nicholson.
El alto mando habló durante una ceremonia para transferir la responsabilidad de los guardafronteras afganos del Ministerio de Interior al de Defensa, en la que también destacó que se está produciendo una reducción en el número de bajas del conflicto.
“Estamos luchando contra la corrupción, soldados y policías ahora están reportando casos de corrupción, lo que es una cosa buena. Os estáis transformando en una fuerza de combate ofensiva”, indicó a los militares afganos presentes.
Nicholson recordó que se va a duplicar el número de efectivos de las Fuerzas Especiales afganas y triplicar el de las Fuerzas Aéreas, además de continuar entrenando a los soldados locales en el uso de helicópteros de transporte Black Hawks.
Según datos de las fuerzas estadounidenses, los talibanes ganan anualmente unos 200 millones de dólares con la venta de droga, una cantidad incluso superior a la que necesitan para cubrir los gastos de su guerra contra las tropas internacionales y locales.
La producción de opio en Afganistán creció un 87 % durante 2017 hasta alcanzar un volumen estimado de 9.000 toneladas, una cifra récord que se vio acompañada por un incremento del 63 % de la superficie dedicada al cultivo de adormidera, según un informe del Gobierno afgano y la ONU divulgado en noviembre pasado.
Desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015, Kabul ha ido perdiendo terreno ante los insurgentes hasta controlar apenas un 57 % del país, según el inspector especial general para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR) del Congreso de Estados Unidos.