Por Miguel Cruz Tejada.
NUEVA YORK._ El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos, informó que ha deportado a 396.000 inmigrantes extranjeros durante el año fiscal 2011, de los cuales las autoridades migratorias dicen que hay 217.000 criminales.
El DHS señala que deportar criminales es su principal prioridad, aunque organizaciones y activistas que defienden los derechos de los inmigrantes, se quejan de que las repatriaciones son indiscriminadas y además de que esa política, es el resultado de un “sistema roto”, está dividiendo a las familias principalmente hispanas.
Seguridad Nacional dijo que esas deportaciones se han realizado en operativos hechos por la Policía de Aduanas y Fronteras (ICE) y en los que cuales se detuvieron a más de 4.400 criminales convictos entre junio y julio de este año.
Explica el DHS que los extranjeros ubicados en el Nivel Delincuente 1, han sido condenados por los tribunales por delitos criminales como asesinatos, violaciones y abuso sexual contra niños y cita el caso de un ciudadano del Reino Unido detenido en Kansas City y quien fue sentenciado a seis años por un acto lascivo con un menor de 14 años de edad.
El comunicado añade que en otros casos similares, un jamaiquino residente en Miami fue condenado por agresión agravada con un arma de fuego y robo, un hondureño por abuso sexual contra un niño, un mexicano residente en Arizona asaltó y robó a mano armada a un agente federal.
Otro mexicano de Utah fue condenado a seis años por violar sexualmente a un menor y un inmigrante de Laos, fue condenado en Minnesota por homicidio involuntario y conducta sexual criminal contra un niño de 11 años de edad.
Un guatemalteco, detenido en Ashburn (Virginia) fue hallado culpable de agresión sexual.
El DHS sostiene que esos parte de los miles de casos que ilustran las conductas antisociales de la mayoría de deportados a sus países de origen desde Estados Unidos, donde se mantiene una política de cero tolerancia contra extranjeros criminales.
“Nuestros oficiales están todos los días en las calles en busca de lo peor de lo peor, específicamente extranjeros criminales que se esconden en nuestras comunidades, donde podrían cometer más crímenes”, dijo Gary Mead, director ejecutivo adjunto de la Policía de Aduanas y Fronteras (ICE) que se encarga de ejecutar los operativos diseñados por la Oficina de Deportaciones (ERO) del Departamento de Seguridad Nacional.
Recientemente, entidades y activistas denunciaron que sólo desde Nueva York, fueron deportados miles de latinos en su mayoría dominicanos, mexicanos y centro y suramericanos dentro del programa del DHS denominado “Comunidades Seguras” que debe contar con el aval de las autoridades locales para poder ser emprendido en los estados escogidos por los federales.
