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Cuando Caemmerer supo de estas ciudades vacías, se sintió fascinado de inmediato. “Como fotógrafo de arquitectura, encontré atrayente de una manera perturbadora la noción de un pueblo fantasma contemporáneo”, dijo.
“Estas ciudades chinas están construidas hasta la completud antes de que ingresen personas”, dijo Caemmerer. “Debido a esto, hay un periodo intermedio entre las fases finales de desarrollo y cuando las áreas devienen visiblemente habitadas, durante el cual muchos de los edificios permanecen vacíos”.
En 2015, Caemmerer fotografió el Distrito Kangbashi de Ordos, el Distrito Financiero de Yujiapu y el desarrollo del Lago Meixi, cercano a la ciudad de Changshá.
“Fue la uniforme novedad de estas ciudades lo que originalmente atrajo mi interés”, dijo Caemmerer.
“Constantemente, estas ‘áreas nuevas’ son ciudades satélite localizadas en proximidad con una ciudad más vieja y consolidada”, explicó.
Caemmerer pasaba las noches en una ciudad vecina más poblada.
Él tomaba fotos dos veces al día, antes del amanecer y justo después de la puesta del sol, a lo largo de 80 días.
Por fortuna, Caemmerer no se metió en problemas legales mientras fotografiaba las ciudades. “Esas áreas se sentían bastante seguras”, dijo.
Debido a la novedad de los lugares, Caemmerer describió las ciudades como “surreales” y “sorprendentes”.
“Usualmente, cuando estás en una ciudad, te puedes relacionar con su tiempo de vida mediante la identificación de distintas eras de la arquitectura o la interpretación de la edad relativa de las estructuras y el panorama a tu alrededor. Cuando visitas una ciudad que ha sido construida justamente en los cinco o seis años anteriores, estos indicadores de edad todavía no son visibles”, dijo Caemmerer.
En la rara ocasión en que Caemmer convivía con personas, ellas usualmente se mostraban intrigadas por el aspecto arcaico y el formato grande, cinematográfico de su cámara.
Estas imágenes están documentando “un momento complejo de la urbanización de China”, dijo Caemmerer. “De muchas de estas nuevas ciudades no se espera que estén completas o vibrantes hasta 15 o 25 años después de que inició su construcción. Ellas están construidas para el futuro distante y en el presente sólo podemos especular qué forma habrán tomado cuando alcancen ese punto en el tiempo”.
A lo largo de China hay cientos de ciudades que tienen todo lo que uno necesita para llevar un estilo de vida moderno y urbano: edificios elevados de departamentos, costeras desarrolladas, rascacielos e incluso arte público. Todo lo necesario, excepto un factor principal: personas.
