El director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), ingeniero OIgo Fernández, consideró que la construcción de la presa de Guaigüi es una necesidad para La Vega y el país, por lo cual defendió el reinicio de los trabajos del proyecto, paralizados hace varios años.
Sostuvo que este proyecto hidroeléctrico es necesario para controlar las inundaciones en el Bajo Yuna y las provocadas por el desbordamiento del río Camú en áreas pobladas de la ciudad de La Vega y zonas agrícolas.
Entrevistado en el Palacio Nacional, Fernández explicó que se está a la espera de una decisión del presidente Danilo Medina respecto al reinicio de los trabajos de construcción del embalse.
“Mi opinión es que esta presa es una necesidad para la provincia La Vega, para garantizar agua potable a los veganos y controlar las inundaciones, pero la última palabra la tiene el Presidente y hay que esperar que él tome la decisión”, señaló el funcionario.
Insistió en que hay que esperar la decisión del presidente Medina sobre los reclamos de reinicio de la obra, la cual, según el funcionario, también es una necesidad para el país.
El director del Indrhi indicó que el mandatario ha recibido las explicaciones técnicas sobre esta obra y de sus componentes económicos y sociales para la comunidad vegana.
La viabilidad del embalse está contenida en un proyecto- estudio presentado por el Indrhi en 2012 para retomar la construcción de la presa.
BENEFICIOS DEL PROYECTO
El director del Indrhi destacó que la obra suplirá la demanda de agua del acueducto de La Vega en 100 % durante período de 20 años, garantizará el líquido de 86,459 tareas tareas sembradas de arroz y otros rubros que son irrigados por los canales de los afluentes Camú, Las Rosas y Hato Viejo, y permitirá la incorporación de otras 12 mil 700 tareas a la producción agrícola de la zona.
Asimismo, aseguró que el Proyecto de Aprovechamiento Múltiple del Río Camú controlará la escorrentía de de 76.6 kilómetros cuadrados de la cuenca del afluente, lo que dijo se traducirá en una disminución significativa del riesgo de pérdidas de vida humanas en La Vega y propiedades en las comunidades aguas abajo de la presa y en la región del Bajo Yuna, e incrementará de manera significativa la regulación de la cuenca del río Yuna.
Otro de los beneficios, de acuerdo al Indrhi, será la generación de 12.5 gigawatts hora al año, lo que permitirá al país ahorrar la importación de 22,482 barriles de petróleo al año, representando una economía de US$2144,108.34 en el mismo período. En adición, evitaría la emisión al medio ambiente de 7,869 toneladas de dióxido de carbono (C02).
EMBALSE EVITARÁ GRANDES INUNDACIONES
Las grandes avenidas que se presentan en el río Camú, con frecuencia de tres a cinco años, provocan fuertes inundaciones en la ciudad de la Vega y áreas circundantes, según se consigna en el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto hidroeléctrico, preparado por el Indrhi.
Establece que en los últimos 10 años la ciudad de La Vega ha tenido dos grandes inundaciones, una en el 1993 y otra en 1998, con el huracán Georges, provocando pérdidas de vidas humanas y materiales.
Indica que en 1993 las inundaciones afectaron el 70% de la ciudad, afectando a centenares de familias y provocando pérdidas materiales millonarias. Las pérdidas materiales producidas por Georges se estimaron en más de 40 millones de pesos ( US$2.5), más de 20 mil personas se vieron afectadas y 300 perdieron sus hogares.
Este problema queda mitigado con la ejecución del Proyecto de Aprovechamiento Múltiple del Río Camú- presa de Guaigüí.
SOCIEDAD VEGANA
Representantes de la sociedad vegana han reclamado al gobierno reiniciar con urgencia la construcción de la presa, que consideran la obra prioritaria para la Vega.
Acordaron poner esta obra como el primer punto del Plan Estratégico de Desarrollo de La Vega, por considerarla clave para el bienestar económico y social de esta provincia, planteamiento que ha concitado un respaldo masivo en la población.