CARACAS.- El ministro de Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, aseguró este miércoles que este país está preparado para una «guerra prolongada», después de que en las últimas semanas Estados Unidos haya reforzado su presencia militar en aguas del Caribe para hacer frente, según dice, al narcotráfico en la región.
Cabello argumentó, además, que para defender al país «se vale todo, menos hacerse el pendejo para no defenderla, pero se vale todo». Estas declaraciones del jefe de la cartera de Interior se producen después de que en las últimas semanas haya escalado la tensión entre Caracas y Washington, que acusa al «régimen» de Maduro de orquestar el envío de drogas a Estados Unidos, en lo que ha calificado de «guerra asimétrica».
La Administración Trump ha designado al Tren de Aragua y al Cártel de los Soles, dos conocidas organizaciones narcotraficantes basadas en Venezuela, como «grupos terroristas y ha aumentado la recompensa que pesa sobre el presidente Maduro hasta los 50 millones.
Además, el Pentágono ha desplegado buques, submarinos y 4.000 marines en el Caribe para reforzar las operaciones contra el narcotráfico. La misión, cerca de Venezuela, incluye vigilancia aérea y naval, y está previsto que se prolongue durante varios meses, según informaron fuentes del Gobierno
Por su parte, Maduro ha animado a los venezolanos a estar preparados para una posible incursión estadounidense y les ha animado a alistarse en la Milicia Nacional Bolivariana, un llamado al que, según Caracas, habrían respondido miles de ciudadanos.
El secretario Hegseth visita a las tropas en Puerto Rico
Después de que el Pentágono enviará diez cazas F-35 a la región, con el objetivo de contar con una mayor capacidad de fuego en su lucha contra los cárteles, esta semana, el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, viajó a Puerto Rico para pasar lista a las tropas.
«Este es una maniobra en el mundo real, en favor de los vitales intereses nacionales de Estados Unidos, para acabar con el envenenamiento del pueblo estadounidense», aseguró Hegseth el lunes al dirigirse a las tropas del portaviones USS Iwo Jima, que surca estos días las aguas del Caribe.
Días antes, el presidente Donald Trump ya había informado de que el Ejército estadounidense había hundido una lancha frente a las costas de Trinidad y Tobago que presuntamente transportaba un cargamento de droga desde Venezuela. En la operación murieron los 11 tripulantes que viajaban en el bote.