PUERTO PLATA.- La filial Los Mina de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos pidió a los jueces del Tribunal Colegiado de Santiago, dejar en libertad al retirado primer teniente de la Policía Nacional; Luis Rafael Fermín Cabrera (Cabrerita), quien está preso desde el 2009 en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Hombres, en San Cristóbal, por un delito que presuntamente no cometió.
La petición se realiza a propósito de que el próximo martes 26 de mayo se conocerá una audiencia en Santiago de los Caballeros y según una nota remitida a este medio informativo por el Ochar G. Santana, presidente en esa zona de los Derechos Humanos, indicó que, según una investigación realizada, contra Fermín Cabrera se produjo una conspiración de parte de un supuesto narco de Puerto Plata, que se disfraza de empresario y que involucró a oficiales policiales, un fiscal y a jueces de Puerto Plata.
“Es un secreto a voces que a Fermín Cabrera lo involucraron con mucha mala fe en un doble crimen acusándolo, sin una sola prueba, de que sustrajo los casquillos de bala de la escena del crimen donde sicarios contratados por el narco asesinaron a Aladino Acevedo Díaz y al ingeniero Engels Sarita Almeyda, hecho de sangre que aconteció en la avenida manolo Tavares Justo de Puerto Plata el 1 de marzo del 2006”, explicó Santana.
Dijo que los jueces que el 26 de este mes tienen audiencia en Santiago, si estudiaron el expediente a fondo descubrieron la conspiración y por eso esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos les solicita que hagan justicia dejando a Fermín Cabrera en libertad para que se inserte a la sociedad como un hombre de bien.
Santana dijo estar convencido de la inocencia del ex oficial policial y una prueba de ello es que el 21 de marzo del 2011, la Suprema Corte de Justicia (SCJ) emitió la sentencia 47 ordenando la realización de un juicio nuevo en Santiago de los Caballeros tras admitir un recurso de casación interpuesto por los abogados del acusado contra la sentencia 00051/2011 que emitió un Tribunal Colegiado de Puerto Plata que lo condenó a veinte años de reclusión.
