El temor se ha apoderado de los moradores de varios sectores de Santo Domingo Norte, a causa de la inseguridad que padecen por los continuos robos y atracos.
Barrios como Sabana Pérdida, Marañón I y La Javilla, entre otros, son definidos como “zona apache” en las noches, lo que obliga a sus residentes a cerrar las puertas de sus casas y negocios desde que se oculta el sol.
Los denunciantes dicen temer a los delincuentes y por eso piden que sus nombres no sean revelados.
El día es “un poquito más seguro” pero con frecuencia un hombre o una mujer grita que le atracaron o robaron dentro de su casa.
Entre los negocios “más dulces”, como dicen los moradores, para ser robados están los colmados y las bancas de loterías que generalmente están abiertos por más horas en las noches.
Poca vigilancia
En cuanto a la vigilancia de la Policía, dijeron que a veces ven desplazarse miembros de esa institución por las calles del sector, pero no permanecen el tiempo suficiente. “Ellos vienen, dan un paseíto y luego se retiran, cosa que aprovechan los delincuentes para llevar a cabo sus acciones”, aseguran.
Pidieron a las autoridades que aumenten el patrullaje en la zona y ayuden así a que disminuyan los robos, asaltos y en ocasiones muertes de personas laboriosas de esos sectores de la provincia Santo Domingo.
Otros males
Además de la inseguridad, los residentes en esos sectores padecen otro problema: la recogida de basura. Se quejan de que en cada esquina se observan vertederos improvisados que evidencian las deficiencias en la recolección de desechos en esa demarcación, situación que aseguran amenaza su salud.
Montones de desechos sólidos se observan en las esquinas de la entrada de los barrios, sobre todo a lo largo de la avenida Hermanas Mirabal, vía que recorre el Metro de Santo Domingo en su ruta que une a este sector con la capital.
La Alcaldía de Santo Domingo Norte, donde está ubicado el vertedero Duquesa, zona en la que se vierten los desechos que se producen en el Gran Santo Domingo, asegura que mantiene un ritmo normal de recogida de basura, pero los residentes en los barrios de la zona se quejan por la cantidad de desperdicios acumulados.
