Haití, señor ministro, si existe!!! Es una nación, es un país, solamente su engreimiento, y que clase de altanería, es capaz de no reconocer el valor de Haiti, lo menos que usted debería hacer es retractarse de su desacertada y bochornosa declararación, y pedirle perdón al pueblo haitiano por tan indignante manera de referirse a una patria.
Señor ministro, perdóneme, pero de dónde saca usted tanta autoridad para emitir un juicio de esa naturaleza, discriminatorio y vulgar, racista e intolerante contra la república de Haiti?
Haiti, con todas las cosas que tiene que superar y resolver, tiene un gobierno que fue elegido por la vía democrática, no lo llame usted pandilla.
Pandilla es un grupo de gente que comete o realiza actos ilícitos, pero también es gente que se junta para engañar o perjudicar a otros, y otra cosa, es propio de una pandilla de la índole que sea, generar trampas y fullerías.
Y si vamos a poner en perspectiva el tema, aquí, hace tiempo que muchas cosas han dejado de existir para perjuicio del pueblo, y muchas pandillas han estado operando causando daños morales y materiales a una gran mayoría de la sociedad dominicana, por un tubo y siete llaves.
Yo bendigo en el nombre de Jesús a la nación haitiana.