ROMA (Reuters) – Miles de trabajadores y parados marcharon el sábado en Roma para protestar por un paro récord y pedir al Gobierno de Enrico Letta, que lleva dos meses en el poder, que haga más que un discurso vacío al respecto.
La manifestación, organizada por las tres grandes confederaciones sindicales CGIL, CISL y UIL, fue la primera gran protesta desde que la amplia coalición de Gobierno de Letta, en la que hay partidos de izquierda y derecha, tomase el mando del país tras unas elecciones en febrero que no dieron un claro ganador.
El paro de Italia alcanzó el 12 por ciento en abril, el mayor nivel, y entre los menores de 24 años está por encima del 40 por ciento, un máximo histórico.
Los líderes sindicales, que hablaron ante una multitud trufada con banderas que se estimó en más de 100.000 personas por parte de los organizadores, criticaron a Letta por lo que calificaron como una falta de acción sobre un problema urgente.
“No podemos aceptar esas promesas continuas que no se convierten en decisiones que dan un cambio de dirección”, dijo Susanna Camusso, líder del mayor sindicato de Italia, el CGIL.
Luigi Angeletti, jefe del UIL, dijo que el país no podía permitirse la actuación política adoptada hasta ahora, especialmente cuando la coalición de Gobierno es frágil.
“En un país en el que la principal preocupación es apostar cuánto tiempo durará el Gobierno, el mensaje es que no hay más tiempo para promesas y anuncios”, dijo en la plaza de San Giovanni, un lugar tradicional para las protestas de izquierda.
El Ejecutivo de Letta va a anunciar un paquete dirigido a atajar el paro juvenil la próxima semana, pero Angeletti dijo que las medidas que se esperan, como exenciones fiscales para las empresas que contraten a jóvenes, eran “inútiles”.
La economía italiana se ha contraído cada trimestre desde mediados de 2011 – su recesión más larga desde el final de la guerra- y las compañías pierden personal cada vez más rápido.
Los sindicatos pidieron una intervención para evitar que el fabricante de electrodomésticos Indesit despida a 1.400 empleados.
Un manifestante, Lorenzo Giuseppe, dijo a Reuters que había salido “para mandar un mensaje al Gobierno de que los empleos deben estar en lo más alto de la agenda. Si hay trabajo podemos seguir adelante”.
Millones de italianos están tan convencidos de que no hay posibilidad de encontrar empleo que han abandonado la búsqueda, lo que supone que las cifras oficiales desestiman gravemente el número de parados, según la oficina de estadística ISTAT.