Por Miguel Cruz Tejada.
Agentes de la Administración Anti Drogas de los Estados Unidos (DEA), arrestaron y acusaron en Providence (Rhode Island) al dominicano Alfredo Ballester Sánchez, a quien le imputan ser un importante traficante de la letal heroína fentanilo y cuyo consumo en sobredosis, ha matado a docenas de adictos en el Noreste de Estados Unidos.
Ballester Sánchez, de 32 años de edad, fue detenido luego que un encubierto de la DEA le comprara la droga como parte de una estrategia para capturarlo.
El acusado, le dijo al informante federal que tenía “de lo bueno” y el encubierto le compró tres bolsas que dieron positivo como heroína fentanilo, luego de lo cual, los agentes allanaron el apartamento del dominicano con una orden de arresto.
La oficina del fiscal federal del distrito de Providence, Peter F. Neronha, en el allanamiento, los agentes encontraron cuatro bolsas de la droga que estaban escondidas en una barra de desodorante con un fondo falso.
Se le acusa de tres cargos por narcotráfico y de ser hallado culpable, enfrenta hasta 20 años en la cárcel y $1 millón de dólares en multas por cada uno de los cargos.
Fue instruido de las acusaciones el martes de esta semana ante la jueza federal Patrice A. Sullivan y el reo escuchó el proceso a través de un intérprete en español.
La fiscal federal adjunta, Pamela E. Chin, pidió al juez que dejara en prisión y sin fianza a Ballester Sánchez, debido a que es “un narcotraficante de alto volumen de entrega”.
La jueza dijo que el dominicano había condenado en Puerto Rico, por posesión de armas de fuego, lo que demuestra una tendencia hacia actos violentos.
En octubre del 2013, fue arrestado por un caso de violencia doméstica en la ciudad de Woonsocket y también violó una orden de alejamiento, emitida a nombre de su novia Isabel Pagán.
Funcionarios de salud en el Rhode Island, ha situado en 56 el número de adictos que han muerto por sobredosis de ese tipo de heroína en lo que va de año. 19 decesos fueron confirmados mediante pruebas de laboratorio y el resto se considera “sobredosis probables”, basándose los especialistas en la evidencia y pruebas de detección temprana.
De las 19 muertes de adictos, sólo una involucró medicamentos recetados y el restó murió ingiriendo drogas ilícitas. 15 de los muertos tenían fentanilo en sus sistemas.
