Santo Domingo, 18 abr (EFE).- El presidente Danilo Medina, asegura en una entrevista exclusiva con Efe que las repatriaciones que “deban producirse” tras concluir el plazo del Plan de Regularización de Extranjeros, actualmente en marcha, se realizarán con “pleno respeto a los derechos humanos”.
Además, indica, con el acompañamiento de la comunidad internacional.
En la entrevista, Medina insiste en que no habrá prórrogas, algo, asegura, que no es “por capricho”.
“Yo expuse con honestidad ante el secretario general de la ONU que la comunidad internacional tiene que entender que somos un pueblo pobre y no podemos asumir el costo de dos pueblos pobres”, relata.
A su vez se muestra convencido de que la comunidad internacional “no puede pedirle a República Dominicana lo que no pide a los demás”.
Su Ejecutivo, explica, se centra en regularizar y documentar a todo aquel que cumpla los requisitos.
Recuerda también que en septiembre de 2014 aprovechó pedir ante la Asamblea General de la ONU que la comunidad internacional pasara de las palabras a los hechos y que auxiliara a Haití para que documentara a sus ciudadanos, debido a los altos costos económicos.
En sus palabras, por escrito, a Efe, admite que en el país había, hasta ahora, un problema de falta de documentación y por tanto de derechos y ahora la comunidad internacional “está conociendo cada vez más los avances que estamos realizando en esta materia”.
Subraya que se trata de un problema que se arrastraba desde hace décadas que no se limitaba a la población haitiana sino que alcanzaba también a dominicanos y a inmigrantes de más de 100 nacionalidades diferentes.
Para solucionarlo, apostilla, su Gobierno ha puesto en marcha en “tiempo récord”, el más “ambicioso” y “completo” plan en la historia del país en esta materia y cuya misión es “normalizar” el estatus migratorio de muchos ciudadanos.
“A fecha de hoy, decenas de miles de personas han iniciado su proceso. Este es efectivamente un logro que estamos deseando divulgar al resto de países de la región”, remarca.
En su conversación con Efe, Medina también se refiere, entre otros temas al problema de la pobreza, que califica del “más importante desafío” que tiene el Ejecutivo.
Según el presidente en los primeros dos años y medio de gobierno un total de 583,823 dominicanos salieron de la pobreza, reduciéndose la tasa de un 42.2 % a un 35.5 %.
“Esta cifra es una buena noticia, pero también una medida de lo mucho que nos queda por hacer”, indica el jefe de Estado quien agrega que durante su Gobierno se han creado 300,000 empleos y se ha consolidado un nuevo modelo productivo que combina un crecimiento económico sostenido, que el año pasado fue del 7 %, con una extensión de los derechos sociales.
“Humildemente, quizá nuestro mayor legado sea haber mostrado que es posible generar confianza en los sectores económicos, con un manejo responsable de la economía y, a la vez, realizar una inversión sin precedentes en nuestra gente. Quien diga que eso no es posible, está invitado a venir a ver que sí lo es”, remarca.
En relación al narcotráfico, otro problema en el país y en la zona, reconoce que las políticas emprendidas hasta el momento han tenido “resultados muy limitados”.
“Tanto por justicia como por pragmatismo tenemos que atrevernos a abrir nuevos debates, a explorar nuevos caminos”, opina.
“El tránsito de drogas con destino a su consumo en los países ricos, es un desafío constante a la estabilidad de nuestras democracias y a la vida de nuestros ciudadanos”, asevera.
Por último, el gobernante se refiere a la reciente VII Cumbre de las Américas de la que asegura estar satisfecho con los resultados y en la “teníamos una agenda de trabajo concreta y la cumplimos”.
Sobre el encuentro entre el presidente cubano, Raúl Castro, y el mandatario estadounidense, Barack Obama, afirma que no se puede negar que es un “hecho histórico”.
“Este deshielo lo veníamos esperando desde hace mucho todos los países de la región. Estamos ante la oportunidad histórica de superar, para siempre, las desconfianzas heredadas de la guerra fría”, concluye.