SANTO DOMINGO.- El empresario José Luis Corripio Estrada considera que al país no le conviene ninguna alteración a la paz y al orden público, ya que esta situación iría en detrimento de todos los sectores, incluidos los políticos que hacen reclamos sobre las pasadas elecciones, sin importar el caudal de votos que hayan recibido.
“Yo no creo que la violencia sea una forma para dirimir ningún problema, sobre todo cuando hay formas y recursos legales para impugnar resultados o reclamar derechos electorales”, expresó.
Con relación a las denuncias sobre irregularidades que hacen candidatos congresuales y municipales de diversas localidades, reconoció que lo que realmente hace legítima unas elecciones es que “los que pierden estén seguros de que perdieron”.
“Yo creo que lo procede es que haya el convencimiento de quien perdió y quien ganó“, precisó Corripio, entrevistado luego de una conferencia que pronunció como invitado especial en el Desayuno de la Asociación Dominicana de Agrimensores.
No obstante, afirmó que no entendía lo que ha pasado con el conteo de los votos en algunos colegios electorales, porque el cierre de las actas se realiza en presencia de los delegados de cada partido y ellos certifican y validan los resultados que allí se escriben.
“Yo no veo tanto problema en interpretar un acta, sea de la mesa que sea, que haya sido cuadrada delante de todos los delegados, que ellos certifican y la llevan a cada uno de sus partidos”, manifestó.
Señaló que el cierre de una mesa electoral es como la operación del cuadre de una cajera de un banco o cualquier negocio.
“Es como el cuadre de una cajera de un banco, que no se va sin verificar junto a su supervisor el resultado del día, y eso pasa en las mesas electorales que nadie se va sin cuadrar los resultados de las votaciones, que se hace en presencia de cada delegado”, precisó.
Reiteró que no entendía cómo un acta que se cierra en presencia de los delegados de cada partido, que la certifican y llevan una copia firmada por ellos mismos para entregarlas a los candidatos y dirigentes de sus organizaciones, sea después objeto de malas interpretaciones.
“Si cada delegado hizo el uso correcto de su derecho electoral de verificar que los datos inscritos en cada acta eran correctos, entonces esos resultados no deben ser objeto de tantos cuestionamientos”, concluyó.
Durante los días siguientes de las elecciones del pasado 15 de mayo, decenas de candidatos congresuales y municipales de todos los partidos políticos vienen reclamando, con violencia en algunos casos, que han sido perjudicados por irregularidades cometidas en el proceso.
Distintos sectores representativos del país, incluidos el empresariado nacional y la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) han pedido calma a los partidos y dirigentes políticos al reclamar, señalando que el aparato productivo y la paz social pueden ser afectados.