El cohete se lanzó desde la base aérea de Banghyon, situada en el oeste del país, a las 7:55 horas del domingo (22.55 horas GMT del sábado), y voló unos 500 kilómetros dirección este hasta que cayó en aguas del Mar de Japón, según datos del Ministerio de Defensa de Corea del Sur citados por la agencia Yonhap. Pyongyang, a través de los medios estatales, no ha confirmado aun el lanzamiento.
Seúl cree que el régimen norcoreano lanzó una “versión mejorada” del misil de medio alcance Musudan, capaz de recorrer una distancia de entre 3.000 y 4.000 kilómetros y alcanzar, por ejemplo, las bases militares estadounidenses en Japón y en Guam, en el Pacífico. No es la primera vez que lo dispara: durante el año pasado se llevaron a cabo más de una veintena de pruebas similares con cohetes de corto o medio alcance. Algunos de estos lanzamientos se realizaron desde plataformas móviles y hasta submarinos, con más o menos éxito.
El objetivo final del programa nuclear de Corea del Norte es lograr miniaturizar ojivas nucleares y equiparlas a misiles de largo alcance, es decir, que puedan llegar hasta territorio continental estadounidense. De ahí la combinación del régimen entre ensayos con bombas atómicas y los continuos disparos de misiles balísticos. Los expertos dudan que el país haya desarrollado la tecnología suficiente para este fin, pero reconocen que en los últimos años ha habido avances considerables de capacidad armamentística.