El cónsul dominicano en Nueva York, Carlos Castillo, rechazó ayer que los dominicanos hayan asumido el liderazgo en el negocio de las drogas en esa ciudad como declaró al periódico El País el agente especial James J. Hunt, a cargo de la Agencia Antidrogas de Nueva York (DEA, por sus siglas en inglés), según una información publicada ayer.
“Yo difiero mucho de lo que dice el agente Hunt en ese reportaje”, precisó Castillo, tras sostener que aunque hay dominicanos que han tenido problemas por asuntos de drogas, cree que no ha sido en la dimensión que lo ha definido el agente Hunt.
Dijo que reconoce a la comunidad dominicana en Nueva York como laboriosa, aunque indicó que hay sus excepciones.
Sostuvo que ese prejuicio de estigmatizar a los dominicanos que emigraron en la década del ochenta y del noventa no se corresponde con el dominicano que ha conocido en ese Estado.
Señala que no considera que los dominicanos tengan el control en el negocio de las drogas, tras precisar que, por el contrario, se han distinguido por muy trabajadores al punto de que 88 por ciento de los 800 supermercados que operan allí son de dominicanos.
Puntualizó que hay una comunidad carcelaria de dominicanos por muchos delitos, entre ellos violencia doméstica, estafas, robo, asuntos migratorios, violación a leyes de tránsito y otros por drogas.
“Muchos están por un delito menor, cuando te meten en el récord ven que estás por una situación no regulada y eres inmediatamente elegible para ser deportado”, expresó.
Planteó que el mayor problema en Nueva York es con Las Maras Salvatruchas, involucrados en narcotráfico, asesinatos y secuestros.
“Yo creo que Las Maras Salvatruchas han desplazado por mucho a los dominicanos que cometen actos ilícitos allá”, refirió Castillo.
Las Maras Salvatruchas es una organización internacional de pandillas criminales originadas en Los Ángeles, que se ha expandido a otras regiones de Estados Unidos, Canadá, México, Centroamérica y Europa.
El cónsul dominicano en Nueva York, Carlos Castillo, fue el invitado al Desayuno de Listín Diario, que encabezó el director del periódico Miguel Franjul.
Estuvo acompañado por los vicecónsules María Mateo, encargada del área jurídica; Eduardo Hernández, jefe de gabinete, y Víctor Comprés, encargado de Personal; así como por Haile Rivera, asistente del Cónsul, y Carlos Miguel Polanco, auxiliar consular.