NUEVA YORK.- El Consulado General de la República Dominicana intervinó ante un juez de inmigración para evitar la deportación del dominicano Wilson de la Cruz, quien tiene un trasplante de riñón, necesita tratamiento y medicamentos especiales permanentes.
El caso será conocido este miércoles en un tribunal migratorio de Manhattan.
De la Cruz se trata en el hospital Mount Sinaí, cuya administración se comprometió a entregar a sus familiares la medicina que necesita para que las envíen a la República Dominicana en caso de que lo deporten.
El cónsul Carlos Castillo envió una carta al juez sobre el estado de salud de De la Cruz y explicando los riesgos de muerte si es enviado a la República Dominicana, donde no hay los medicamentos que necesita.
Castillo pidió compasión al juez en el documento en el que anexó las evidencias y registros médicos.
De la cruz fue acusado de conspiración para traficar drogas, en un caso mal manejado por su abogado en la corte, por lo que estuvo alrededor de tres años preso en Rikers Island.
Wilson visitó el Consulado junto a su esposa para agradecer al cónsul por el apoyo y dijo que está esperanzado y con fé en que saldrá airoso del proceso.
La policía acusó a De la crus de haber realizado transacciones de drogas a través de un celular. Sin embargo, el dominicano negó los cargos.
Su esposa y familiares dijeron que tienen sus esperanzas puestas en que el juez se compadezca y anule su deportación.
“Tenemos la creencia de que el juez entenderá que si es deportado, en su país no va a poder costear los gastos para seguir su tratamiento, ya que los medicamentos no se pueden conseguir allá”, dijo uno de los parientes.
Agregó que “si lo deportan, lo estarían mandando a una muerte segura, porque no tendrá posibilidad de conseguir tanto dinero, en caso de que aparezcan las medicinas”.
“Pedimos que el juez le permita permanecer en Estados Unidos, ya que en su país el costo de algunas de sus medicinas, sobrepasa los 200 mil pesos”, añadió.