El Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, condenó a 30 años de prisión a cuatro personas acusadas del asesinato de Yeri Cordero Sosa, hijo de Pascual Cordero Martínez, alias El Chino, un hecho ocurrido la madrugada del 9 de marzo de 2020, en el sector Bella Vista.
El tribunal presidido por Arlin Ventura e integrado por Leticia Martínez Noboa y Emely Bruno, dispuso que Pablo José Santos Polanco (Pequeño o El Menor), Gerald Utate Rodríguez y Maikol José Báez Santos (El Taxista y/o Zombie), cumplan la prisión en el Centro de Corrección y Rehabilitación de San Pedro de Macorís, mientras que José Alberto Morán Pimentel (El Motorista y/o El Pollo), en la cárcel pública de Baní, en la provincia Peravia.
Los jueces tomaron la decisión, tras acoger el dictamen del Ministerio Público, representado por los fiscales Norabel Méndez, Yuderki Utate, Elaine Soto y Topacio Suero, quienes presentaron pruebas testimoniales, documentales, periciales, ilustrativas, materiales y visuales que resultaron contundentes para dictar la condena, por asociación de malhechores, asesinato y uso y porte ilegal de arma de fuego.
De acuerdo a la acusación presentada por la Fiscalía del Distrito Nacional los imputados tenían alrededor de un mes dándole seguimiento y preparando la muerte de Yeri Pascual Cordero Sosa. Finalmente, ejecutaron el crimen en la fecha antes citada, cuando la víctima salía de una discoteca en la que celebraba su cumpleaños junto a Jassel Kadafi Estepan Lebrón y otros amigos.
Cuando el grupo salió del centro de diversión, según la acusación, fue interceptado por Santos Polanco y Morán Pimentel, quienes desde una motocicleta realizaron varios disparos hacia el interior del vehículo e impactaron a Cordero Sosa en el costado izquierdo y a Estepan Lebrón en la cabeza.
Sostiene que Manuel Mesa Beltré, condenado a 30 años por narcotráfico y quien falleció en la cárcel, encargó el asesinato y envió la suma de un millón de pesos a Gerald Utate Rodríguez, quien distribuyó el dinero a todos los involucrados.