Moca. Los constantes derrumbes en la carretera que comunica a la comunidad el Aguacate con el municipio de Moca amenazan con dejarlos incomunicados.
Con los dos días de lluvias registradas en la zona, la tierra ha comenzado a ceder y al menos ocho viviendas han quedado al borde del precipicio. La comunidad el Aguacate con las aguas de noviembre del pasado año vio el desplome del puente de Cacique, que comunica con la avenida Rosario en el casco urbano de Moca.
Algunos comunitarios atribuyen parte de los derrumbes a que el río Jábaba fue represado por la tierra, ocasionando la erosión y el colapso de dos viviendas, una propiedad de Bienvenido Pérez y la otra de Alipio Portorreal. Hace varios meses que Portorreal tuvo que mudarse junto a su familia a otra vivienda, pero con las lluvias ha visto correr la misma suerte de verse afectada por los deslizamientos.
Para transitar por la vía que lleva a esta comunidad se debe hacer con cautela para evitar caer al vacío. Los comunitarios esperan con urgencia la pronta intervención de las autoridades del Ministerio de Obras Públicas, que en varias ocasiones les han prometido la construcción de muros de gaviones.
Actualmente trabajan en la construcción del puente cacique, pero a un año de iniciar los trabajos, el proceso marcha lento. Para facilitar el paso, fue levantada una pasarela improvisada, pero solo para motocicletas o peatones. Con las lluvias registradas en septiembre de este año, la crecida del río Moca dejó prácticamente a punto de desplomarse al menos doce viviendas en el barrio Saona y Maco Tibio.
Asimismo, la calle principal quedó prácticamente colapsada y solo permite el paso de motocicletas.
En varias ocasiones, el gobernador provincial Diloné Ovalles ha prometido su intervención, sin que esto sea cumplido. Los comunitarios afectados por el río, dicen que el gobierno se ha burlado de su situación. Con continuidad de las lluvias estos problemas se agravan y crece el temor de resientes en zonas vulnerables.