SANTIAGO.-Competencia de mercado, transformación comercial y exigencia del cliente, provocan una acelerada expansión de bancos, asociaciones ahorros y préstamos, cooperativas y otras entidades crediticias en últimos años en Santiago.
Décadas atrás, los bancos que eran la mayoría, tanto público como privado, se concentraban en las calles del casco urbano, mejor conocido como el centro de la ciudad, donde el cliente debía acudir a realizar sus transacciones.
Uno de los factores que han influido en este esparcimiento es el crecimiento experimentado por el sector cooperativo nacional, que con su diversificación, ofrece los mismos servicios que los bancos tradicionales, que van desde ahorros, préstamos, tarjetas de créditos, hipotecas y otros.
Además porque en las últimas dos décadas, Santiago ha experimentado una transformación del sector comercial, que ha dejado de ser las tiendas, en el centro de la ciudad y los almacenes de provisiones en el hospedaje Yaque, principal, centro de acopio y comercialización de rubros agrícolas.
La construcción de plazas, en las afueras y avenidas alternas, han dados pasos, a la instalación de los grandes supermercados, denominado todo incluido y la colocación de una diversidad de establecimientos comerciales, muchos de ellos dando mayor facilidad de acceso y de estacionamiento.
Esos nuevos espacios, han obligado a las entidades crediticias llevar hasta esos lugares sucursales, para brindar servicios a sus clientes, que cada vez exigen más facilidad y comodidad, para realizar sus operaciones.
Es de ahí en adelante cuando se ha desatado una competencia entre estas entidades, que se han visto obligada a descentralizar sus operaciones, para competir con la nuevas ofertas que la representa el creciente sector cooperativo del país.
Sin dudas que este cambio, ha traído beneficios importantes porque esos nuevos negocios han creado más fuente de empleos y una mayor movilidad económica, en todos los sentidos.
Ahora el asunto es, que en cada plaza que se abre en la ciudad, están presentes las sucursales de los principales bancos, cooperativas, y financieras, para ofrecer un mejor servicio al usuario.
Se recuerda que en Santiago, este proceso de expansión, lo inició la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos, entidad que fue colocando sucursales en diferentes sectores de la ciudad y los municipios de la provincia.
Luego, a partir del año 2000, cuando las autoridades del Banco de Reservas iniciaron un proceso de expansión, con la colocación de oficinas en puntos estratégicos de la ciudad y lo mismo han hechos los bancos privados y las otras asociaciones existentes en el país.
Todos saben lo tortuoso que es visitar el casco urbano de la ciudad, caracterizado por calles, estrechas y un tránsito desorganizado, convertido en un caos, lo que hace que muchos decidan mejor, no visitarlo.
Además de las asociaciones y las cooperativas, en el sector privado la competencia la encabezan los bancos Popular, BHD-LEON, Progreso, que parecen disputarse cuál tenga más puntos de ofertas.