P. Regino Martínez, sj.
“Los prejuicios son la razón de los tontos”, Voltaire.
Ciertamente, señores y señoras, que habría que tener buenos “timbales” a la hora de escribir una nota informativa o dar un informe oficial cojo, los cuales, “inocentemente” apoyan acciones que buscan provocar y lograr el rechazo, cuando no mover a la violencia irracional arropada en una mentalidad prejuiciada, carente de todo principio de humanidad. ¿Sadismo? Vaya Ud., a ver.
Solamente, mis queridos lectores, les haré un cotejo de lo que ellos presentaron y dijeron con lo que la comunidad, a la que ellos nunca consultaron presenció durante la madrugada del mismo hecho. Sea usted el jurado, amigo, amiga, lector/a, y sus conclusiones, de seguro le aportarán y convencerá de la calidad de algunos funcionarios y periodistas, que tenemos en el montón.
Lo lastimoso de esto es, que ambas personas alardean de su profesionalidad y dominicanidad, cuyo comportamiento, según su reporte, merecen una “presea ética” pública como ciudadanos ilustres.
Veamos lo que dice el periodista Ricardo Santana en el Listín Diario del 21 de Septiembre 2012:
“El subdirector de Migración en la provincia Espaillat, Delfin Pérez, resultó herido luego que un grupo de haitianos indocumentados agredió a inspectores de ese organismo que realizaban un operativo en la comunidad El Naranjal, del municipio Cayetano Germosén”.
El notable periodista no dice nada acerca de la hora en que fue realizado dicho operativo.
Veamos qué dicen los vecinos que se apersonaron al lugar de los hechos: “En la madrugada del martes, alrededor de las 2.30 AM, agentes de migración llegaron frente a un grupo de casas habitadas por dominicanos y haitianos a pocos metros del cruce de Naranjal, en el municipio Cayetano Germosén. Rompiendo las puertas, las personas no identificadas, entraron en varias casas, entre otra en una donde vive, desde hace más de 10 años, un migrante con su esposa, tres hijos (dos con documentos dominicanos porque nacieron aquí) y un hermano”.
Parece que el Señor Periodista escribe desde su escritorio lo que le dictan desde la DGM, para cultivar el anti-haitianismo, racismo o xenofobia. Como Usted quiera llamarlo. No podemos tapar el sol con un dedo. Esta es la realidad.
Esto fue un botón de muestra, ahora veamos la camisa completa, para que no haya duda de lo planteado aquí por mí: podemos citar lo acontecido en Santiago de los Caballeros hace unos meses atrás, y lo recientemente sucedido en la comunidad de Hato del Medio Abajo, en la Línea Noroeste, perteneciente al Municipio de Guayubín, Provincia Montecristi, el día 17-08-2012, a las 11:03 P.M. Allí, hace un mes, se produjo un allanamiento a alta horas de la noche a un negocito de la Sra. Myrlene Felix, a quien le despojan de RD$42,000.00 pesos. Y vaya sorpresa¿? entre los “asaltantes” estuvieron un militar, de apodo Cuco, de puesto en el chequeo de Mangá, además de un policía y la Fiscal de Villa Vásquez.
Ante esta situación, Solidaridad Fronteriza se apersonó e hizo una investigación topándose con que el policía fue trasladado de su puesto del cuartel de Villa Vásquez, siendo la persona primera que se acusa de la desaparición de los “cuarentidosmil” pesos. Aquí, Hato del Medio Abajo, no hubo desgracia como en Moca, ni la Fiscal ni los agentes fueron heridos por imprudentes. Aún, mis queridos lectores, no se han recuperado el dinero raptado y objetos incautados.
Ante tanta “ingenuidad” del periodista Santana y el inspector Delfín, de la DGM Moca, ahí le va otro párrafo cojo de la información, pues, no dice la hora a que llegaron a Naranjal: “Según informaron autoridades y moradores de El Naranjal, cuando los inspectores de Migración llegaron al lugar a realizar un operativo de repatriación de indocumentados, los haitianos los enfrentaron con palos, piedras y armas blancas, resultando herido el subdirector”.
La propuesta que Solidaridad Fronteriza ha estado haciendo tanto a la Dirección General de Migración, a Interior y Policía, Cámara de Diputados y la Cancillería de la República Dominicana es que se inicie el proceso de Regularización de Inmigrantes que Ordena y Manda la Ley 285-04, Art. 151, para así prevenir los abusos y excesos de la violencia e implementar el respeto a los derechos humanos y no seguir, como un periodista y funcionarios creen, que en esta Sabana, llamada República Dominicana, andamos “como chivos sin ley”.