El Frente de Federaciones de Asociaciones de Comerciantes apoya una revisión del contrato con la empresa minera de capital canadiense Barrick Gold para que el pueblo dominicano reciba el un beneficio justo de la explotación de sus riquezas naturales.
Entendemos que las partes que representan a República Dominicana y a la Barrick Gold están obligadas a sentarse para en un diálogo franco calcular, ajustar y acordar los beneficios que realmente corresponden al pueblo dominicano.
Gracias a Dios que en estos momentos tenemos en el Poder a un presidente que ante que nada coloca los intereses de la patria por encima de todo.
El presidente Danilo Medina es quien debe someter ante el Congreso la revisión del contrato del Pais con esa minera, pues la nación demanda una modificación, revisión y adecuación de ese convenio de manera que en el país se queden mayores recursos que sirvan para impulsar el desarrollo y social del país.
Una de la clausura que requiere revisión es la que establece que el país no recibirá nada hasta que la Barrick Gold no recupere su inversión, que según los últimos datos rondan US$4,000 millones.
Según informaciones publicadas por Barrick Gold, las reservas probadas de los metales presentes en la mina de Pueblo Viejo son 20 millones de onzas troy de oro, 117 millones de onzas de plata y 424 millones de libras de cobre, que a los precios actuales representan $24,000 millones de dólares, que convierte la mina de Pueblo Viejo, Cotuí, en una de las minas más importantes del mundo.
Recordemos que en 2006, la empresa Barrick Gold pagó US$10,400 millones por el 81% de las acciones de la Placer Dome, compra que incluía los intereses de Placer Dome en las minas de cobre de Zaldívar, en el desierto de Atacama de Chile y las minas de oro y plata de La Coipa y Pueblo Viejo, la primera en Chile y la segunda en la República Dominicana. Actualmente la Barrick Gold tiene el 60% de Pueblo Viejo y la Goldcorp el 40 por ciento.
Es necesario revisar y modificar el contrato, porque cuando se firmó el precio del oro era US$300.00 la onza troy y la participación del Estado en las utilidades netas se estimaban en 7.5%, pero el precio ha aumentado más de US$1,000.00 la onza, con una tendencia en asenso, lo que implicaría una participación del Estado en las utilidades netas que mucho calculan de un 50% aunque el contrato establecía un tope de 25%, ya que a partir de un precio de venta de US$475 dólares por onza la participación del Estado en los beneficios se mantenía fija en 25 por ciento.
Gracias a Dios que el sartén está en buenas manos que son las del presidente Danilo Medina.