La exigencia del gobierno estadounidense sobre el cierre del consulado general de China en Houston es «una provocación política» y «una acción indignante e injustificada que sabotea las relaciones China-Estados Unidos», dijo hoy miércoles la embajada de China en Estados Unidos.
«Estados Unidos exigió abruptamente que el consulado general de China en Houston cese todas sus operaciones y eventos dentro de un plazo limitado. Esta es una provocación política lanzada unilateralmente por la parte estadounidense que viola seriamente el derecho internacional, las normas básicas que rigen las relaciones internacionales y el acuerdo consular bilateral entre China y Estados Unidos», dijo la embajada en una declaración.
«China condena fuertemente y se opone firmemente a esta acción indignante e injustificada que sabotea las relaciones China-Estados Unidos», señaló la embajada, la cual observó que China está comprometida con el principio de no interferencia en los asuntos internos de otros países.
A través de los años, las misiones diplomáticas chinas en Estados Unidos, incluyendo al consulado general en Houston, han estado cumpliendo con sus deberes en estricta conformidad con la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, y se han dedicado a promover los intercambios y la cooperación entre China y Estados Unidos y a impulsar el entendimiento mutuo y la amistad entre los dos pueblos, dijo.
«Las acusaciones de Estados Unidos son mentiras infundadas y las excusas que cita son descabelladas e insostenibles. En lo que respecta a la parte estadounidense, si se empeña en atacar a China, nunca está corta de excusas», dijo.