PEKIN (EFE).- China rechazó acusaciones de Taiwán según las cuales habría logrado que la República Dominicana cambiara de bando sus relaciones diplomáticas a cambio de préstamos por más de 3.000 millones de dólares.
“No hemos cerrado ningún acuerdo y no hay necesidad de ello”, afirmó la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunying.
Los ministros de Exteriores de China y República Dominicana, Wang Yi y Miguel Vargas, respectivamente, firmaron ayer en Pekín el establecimiento de relaciones bilaterales, lo que supuso la ruptura de Santo Domingo con Taiwán.
Una fuente del Ministerio taiwanés de Exteriores aseguró poco después del anuncio que Pekín había prometido al país caribeño préstamos por la citada cantidad, que se destinarían a inversiones en infraestructuras y desarrollo.
Sin entrar en cifras concretas, el ministro de Exteriores taiwanés, Joseph Wu, culpó a China de lo sucedido, por su oferta de “incentivos financieros”, y promesas de inversiones y ayuda al país caribeño, destinadas a desencadenar la ruptura de lazos con Taiwán.
En Pekín, la portavoz Hua recalcó que “el establecimiento de relaciones diplomáticas solo tiene una premisa, que República Dominicana respete el principio de una sola China”.
A la denuncia taiwanesa se sumó también ayer el senador estadounidense por Florida Marco Rubio, quien acusó a China de “sobornar” a República Dominicana y pidió que el Congreso de EEUU haga más para contrarrestar la creciente influencia de Pekín en Latinoamérica.
Tras la ruptura con Santo Domingo, que siguió a la de Panamá en junio del año pasado, Taiwán se queda con sólo 19 aliados diplomáticos, diez de ellos en Latinoamérica y el Caribe, que sigue siendo la zona de mayor apoyo a la isla.