SANTIAGO, Chile (AP) — Entre las hijas de generales de la fuerza aérea, uno golpista y el otro víctima de la dictadura militar, está quien gobernará Chile a partir de 2014 luego de que Evelyn Matthei y Michelle Bachelet se enfrenten en las elecciones presidenciales del 17 de noviembre.
La ultraderechista Unión Demócrata Independiente se impuso a su aliado electoral de centroderecha Renovación Nacional, que el martes por la noche depuso su resistencia inicial a Matthei y consagró a la economista de 59 años como la candidata presidencial única del oficialismo.
El oficialismo superó así la crisis que había comenzado una semana atrás cuando el ganador de las elecciones primarias, Pablo Longueira de la Unión Demócrata Independiente, renunció a su candidatura alegando padecer una depresión severa. Su contrincante en las primarias, Andrés Allamand, rechazó el martes ser el postulante de la coalición de gobierno.
“Mientras Michelle Bachelet recorre la 5ta avenida de Nueva York, Evelyn Matthei recorre las regiones y las comunas del país buscando la adhesión ciudadana, en la convicción en que están dados todos los elementos para ganar”, dijo el miércoles Patricio Melero, presidente de la Unión Demócrata Independiente.
La afirmación de Melero insinúa la que se espera sea una dura campaña en la que se enfrentarán las hijas de los generales: Fernando Matthei, ex ministro de Salud y miembro de la Junta Militar de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y la hija de Alberto Bachelet, torturado por sus camaradas por oponerse al golpe y muerto en prisión en 1974, donde fue encerrado por “traición a la patria”.
Alvaro Elizalde, jefe de comunicaciones del comando de Bachelet, reprodujo el llamado de la candidata a desarrollar “una campaña limpia, constructiva, sin agresiones, cuidando el uso del lenguaje”, una de las características de Bachelet, que nunca ataca personalmente a un rival.
Bachelet, una médica pediatra de 61 años, vivió en Nueva York entre 2010 y marzo de este año, donde desempeñó el cargo de directora ejecutiva de ONU Mujer. Renunció antes de concluir su mandato por petición de la oposición de centroizquierda, que durante su ausencia fue incapaz de perfilar un candidato presidencial. Sin ella, la oposición iba derecho a una derrota.
Pero los sondeos sobre intención de voto le dan entre 64% y 43% de las preferencias de los electores.
Bachelet gobernó Chile entre 2006 y 2010 y dejó la presidencia con un índice de popularidad superior al 80%.
La alianza oficialista superó su peor semana en un cuarto de siglo y Melero dijo que ahora se enfocará en “concordar y consensuar un programa común”, una “plena y total garantía de ecuanimidad de la lista parlamentaria” y la “integración plena y amplia en el comando presidencial” de Renovación Nacional.
Agregó que “vamos a ofrecer a Chile una candidatura presidencial de gran nivel, unitaria”.
Pese a que las encuestas coinciden en que Bachelet triunfará en noviembre, Matthei se mostró confiada en que la ex mandataria “es ganable”. La economista inició el lunes una acelerada campaña electoral pese a que Renovación Nacional aún no la había aceptado.