SANTO DOMINGO. El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez salió en defensa del sacerdote Manuel Ruiz, de quien dijo, fue la primera persona que lo alertó sobre la conducta que tuvo en el país el exnuncio Josef Wesolowski, fallecido en Roma mientras esperaba el juicio por las acusaciones de abuso sexual de menores de edad.
El Cardenal, en un comunicado enviado a los medios, expresa: “El padre Manuel Ruíz fue la primera persona que me informó sobre algunas conductas del exnuncio reñidas con las normas de la Iglesia y con posibles implicaciones penales. Por lo complicado del caso, le di instrucciones precisas para que a la mayor brevedad posible, recabara las informaciones que me sirvieran como base para elaborar el informe que, en su momento, presenté personalmente al papa Francisco”.
López Rodríguez dice que tomó la decisión de informar sobre el particular como un acto de justicia ante las declaraciones de periodistas sobre la participación del padre Ruiz en el caso.
Indica que, a su regreso de Roma, asignó al sacerdote para que se reuniera con el Presidente de la República y con el Procurador General de la República, e informarles el alcance de la decisión que había tomado el Papa respecto al nuncio, y sobre la investigación que se abrió en el Vaticano en su contra.
“En adición a esto, le encomendé la misión de poner en contacto a las autoridades dominicanos con la Santa Sede, haciendo posible la mayor colaboración de ambas partes en la investigación citada”.
Agrega que en septiembre del 2013, envió a Ruiz a Roma para que gestionara la designación de investigadores especiales del Vaticano que acompañaran a las autoridades dominicanas en la investigación que se seguía en el país.
“La verdad siempre prevalece sobre la mentira, y lo cierto es que ha sido muy útil la colaboración del padre Ruiz en la investigación contra el exnuncio y otros procesos internos que la Santa Sede y un servidor le hemos encomendado”, dijo.