La popular modelo británica Cara Delevigne admitió que fue una de las muchas víctimas del acoso sexual al que el productor norteamericano Harvey Weinstein sometió durante años a varias actrices de Hollywood.
En un mensaje colgado en su cuenta personal de Instagram, la maniquí e intérprete inglesa, de 25 años, contó cómo Weinstein la citó en una habitación de hotel, donde pretendía realizar un trío sexual junto con otra mujer.
Cuando Delevigne se negó, el productor, que previamente había fanfarroneado sobre otros encuentros sexuales que había mantenido con otras actrices, cuyas carreras supuestamente había impulsado, se abalanzó sobre ella, aunque ésta logró zafarse.
“En cuanto nos quedamos solos, empezó a presumir de todas las actrices con las que se había acostado y de cómo había impulsado sus carreras, y habló de temas de naturaleza sexual inapropiados y entonces me invitó a subir a su habitación”, dijo la modelo.
Si bien ella declinó esa invitación en un principio, alegando que tenía que esperar a un taxi, el ayudante del productor la persuadió para que le acompañara, lo que le hizo sentir “muy desamparada y asustada”.
“Cuando llegué me sentí aliviada al encontrar a otra mujer en la habitación, lo que me hizo sentir que estaba a salvo, pero entonces nos pidió que nos besáramos y ella empezó a avanzar en su dirección”, relató.
Delevigne rememora que en ese punto comenzó a “cantar” en un intento por “hacer que la situación fuera más profesional, como si se tratara de una audición” y dice que el productor le bloqueó el paso e intentó besarla en la boca.
En su mensaje de Instagram, Delevigne, que afirma que fue “reacia” a denunciar la situación porque se sentía “culpable” y por “no herir a la familia” de Weinstein -casado con la diseñadora británica Georgina Chapman, con la que tiene dos hijos pequeños-, urge a las mujeres a “no avergonzarse” a la hora de contar sus historias pues ello “inspirará a otras”.
En un segundo mensaje divulgado en esa red social, también señala cómo finalmente se decidió a confesar lo sucedido: “Quiero que las mujeres y las niñas sepan que el abuso o la violación nunca es culpa suya y que no hablar de ello siempre ocasionará más daño que contar la verdad”.