RÍO DE JANEIRO.- Brasil generó en marzo 19.282 nuevos empleos formales, con lo que volvió a crear puestos de trabajo tras tres meses consecutivos en que los despidos superaron las contrataciones, informó hoy el Ministerio de Trabajo.
Según las estadísticas del Ministerio, en marzo las empresas contrataron a 1.719.219 trabajadores y despidieron a 1.699.937, mientras que en el acumulado de los tres primeros meses del año aceptaron 5.088.689 nuevos empleados con todas las garantías laborales y rescindieron el contrato de 5.139.043.
La generación de empleos formales en marzo, sin embargo, fue insuficiente para contrarrestar los cerca de 636.900 puestos formales de trabajo que Brasil perdió en los tres meses anteriores (555.500 en diciembre, 81.700 en enero y 2.400 en febrero).
El resultado de marzo sorprendió debido a que los economistas esperaban que la pérdida de empleos formales se acentuara ante el estancamiento de la economía de Brasil, que sólo creció un 0,1 % en 2014 y, según las últimas proyecciones, puede sufrir una contracción de hasta el 1,0 % este año.
El número de nuevos puestos formales de trabajo generado en marzo superó al del mismo mes de 2014 (13.117) pero fue significativamente inferior al del tercer mes de los años anteriores (112.400 en marzo de 2013, 111.700 en marzo de 2012, 92.600 en marzo de 2011 y 266.400 en marzo de 2010).
El ministro de Trabajo, Manoel Dias, admitió que el resultado acumulado del año aún preocupa, pero dijo que lo ocurrido en marzo representa un alivio pues puede indicar que el país comienza a recuperarse de la crisis.
“En nuestra opinión, estamos viviendo una crisis política que también impacta la economía. Eso posterga la compra de un apartamento o de un automóvil o la inversión de un empresario. Pero marzo nos muestra que comenzamos a recuperarnos y que abril puede ser mejor”, afirmó Dias en una rueda de prensa.
De acuerdo con el ministro, el ajuste fiscal anunciado por el Gobierno a finales del año pasado, con aumento de los impuestos y reducción de los gastos, comenzó a reflejarse en la confianza de los empresarios y en el mercado laboral.
El sector que más despidió en marzo fue el de la construcción, con una reducción de 18.205 empleos formales, lo que el ministro atribuyó al escándalo de corrupción de la petrolera estatal Petrobras, que afectó a varias de las principales constructoras del país.
El escándalo “afectó a la mayor empresa brasileña (Petrobras) y a algunas contratistas y abastecedoras de la estatal. La paralización de algunos proyectos afectó la generación de empleos”, afirmó.
En contrapartida, el sector servicios generó en marzo 53.778 nuevos empleos formales