Por Juan Bautista Peña Soriano
Haciendo el elogio de la fe en una hermosa y significativa página del Motu proprio Porta Fidei, el Papa Emérito Benedicto XVI, el 11 de octubre de 2012 proclamó el Año de la fe. Los motivos por lo que el Papa ha querido que celebremos la fe en este año son muchos, pero podemos decir que dentro de los principales está el 50 aniversario de la inauguración del Concilio Vaticano II. Otro motivo es el manifiesto el poder de la fe, primero en la Virgen María, los apóstoles, discípulos, mártires, y en los hombres y mujeres que a lo largo de la historia han dado su vida para acercar a todos a Cristo.
El compromiso de fe de todos esos hombres y mujeres ha tenido su origen en el Bautismo, de ahí que en el Catecismo de la Iglesia Católica encontramos que la fe de la Iglesia profesada personalmente por cada creyente, tiene su origen en el Bautismo. (CIC no. 167)
Por estas razones, es que recientemente Su Excelencia Reverendísima Monseñor Antonio Camilo González ha celebrado en la Parroquia San Juan Evangelista de Salcedo, una Eucaristía de acción de gracias por el 75 aniversario de su Bautizo, cumplido el pasado 6 de abril de 2013.
Tradicionalmente cuando los niños nacen, inmediatamente los papás le ponen un nombre, pues saben que es muy importante llamarlo de alguna manera para poderlos registrar y para que sean “alguien en especial”, con nombre y apellido, y de ese modo poder ser ciudadanos del país en que nacieron. Lo que hace que tengan derechos y obligaciones. Pero también de ese mismo modo se interesan por hacerlos hijos de Dios, por medio del Sacramento del Bautismo. Dios nos otorga el don y el regalo de ser hijos de Él, por eso nos ofrece su mismo Espíritu, para que habite en nosotros.
En virtud de esto fue que el 6 de abril del año 1938, a tan sólo dos meses del nacimiento de Gabriel Antonio Rafael Camilo González, Don Antonio Camilo Pantaleón y Doña Caridad Mercedes González Garrido, padres del Sr. Obispo, quisieron llevarlo a la pila bautismal de la Parroquia San Juan Evangelista de Salcedo para hacerlo hijo de Dios, por medio del Bautismo.
En la Eucaristía de acción de gracias, el Sr. Obispo resaltó importancia de la fe, destacando de una manera especial las palabras del Papa Emérito en las primeras catequesis luego de proclamar el Año de la fe. Su Excelencia haciendo suyas esas palabras, explicaba el verdadero sentido de la fe, que no conociste en un mero asentimiento intelectual del hombre a las verdades particulares sobre Dios, sino en un acto con el cual nos entregamos libremente a un Dios que es Padre y que nos ama, y que a la ves nos da esperanza y confianza.
En las palabra de homilía el Obispo también agradeció a todos los que tuvieron que ver con el surgimiento de su fe por medio del sacramento del Bautismo. De una manera especial sus fenecidos padres Don Antonio Camilo y Doña Caridad Mercedes González; sus padrinos David Camilo Pantaleón y Caridad González; José Maria González y María Camilo. Así cómo también al Rvdo. Padre Eliseo Bornia Ariza, quien además de ser el sacerdote que lo bautizó, fue quien bendijo el matrimonio de sus padres.
Hoy también nosotros nos regocijamos con el Señor Obispo de La Vega, en la celebración de sus Bodas de Diamante Bautismales. Y agradecemos sobremanera, aunque ya estén gozando de la gloria celeste, a sus padres y padrinos, y con ellos también al Rvdo. P. Eliseo Bornia, quienes se preocuparon por hacer rápidamente hijo de Dios a este hombre que desde temprana edad no ha hecho más que servirle Dios por medio de la Iglesia, como cristiano, Sacerdote y como Obispo.