La nueva economista jefe del Banco Mundial, Carmen Reinhart, pidió este viernes al G20 extender la moratoria de deuda para los países más pobres más allá de comienzos de 2021 y advirtió que no hay que confundir rebote con recuperación, algo que “aún está muy distante”.
“Tenemos una tendencia a confundir rebote con recuperación, cuando una recuperación verdadera sigue aún muy distante”, aseguró Reinhart en su primer encuentro virtual con un reducido grupo de periodistas desde que asumió el cargo a mediados del mes pasado.
Respecto a la moratoria de deuda de los países más pobres, aprobada por el G20 en abril pasado, subrayó que “la duración de está pandemia es mucho mayor” de lo esperado por lo que hay “una visión clara de que serán necesarios más de seis meses”.
“Mi expectativa es que la extensión a un periodo más largo tiene elevadas probabilidades”, agregó la economista estadounidense de origen cubano y experta en crisis financieras y de deuda.
Reinhart advirtió, además, de la importancia de que el sector privado se sume a la iniciativa, algo que aún no se ha logrado, para tener un impacto mayor.
Los ministros del G20, grupo presidido este año por Arabia Saudí, acordaron en abril la moratoria al pago de los servicios de la deuda de los países más pobres y se volverán a reunir este fin de semana de manera virtual.
Casi 80 países podrán acogerse a esta suspensión de deuda, y reencaminar recursos a enfrentar la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2.
En un comunicado conjunto, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y el presidente del BM, David Malpass, calificaron entonces “la iniciativa de poderosa y de rápida acción” que “ayudará a proteger las vidas de millones de personas en los países más vulnerables”.
Según Malpass, los países más pobres encaran el pago de servicios de deuda en lo que resta de 2020 por valor de 14.000 millones de dólares.
Sin embargo, la severidad de la crisis desencadenada por la pandemia ha provocado que numerosos economistas soliciten una extensión de la moratoria para dar margen de respuesta a los países de menores ingresos. EFE