Ante la mirada indiferente de las autoridades de medio Ambiente, Industria y Comercio, Digenor, la alcaldía municipal, la defensa civil y las instituciones que deben velar por la seguridad de la población, es ampliada la estación de combustible que hace años se levantó a escasos metros de las instalaciones de La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago CORAASAN.
Además de los habitantes que residen en el sector adyacente, quienes perdieron la batalla antes los propietarios de la estación del carburante.
La bomba de expendio de gas se construyó de manera “clandestina” en la avenida Circunvalación, a pesar de que el permiso fue rechazado en principio por el Ministerio de Medio Ambiente.
Esta vez los moradores volvieron a protestar, pero al parecer según algunos, no le sirvió de nada.