La familia de tarjetas gráficas Pascal sigue creciendo, tras enseñarnos el escalón inicial que supone la GTX1060, ahora Nvidia ha decidido que hay que ampliar por la parte de arriba, donde nos encontramos a las soluciones Titan. No, no se llamará Titan P como se había especulado, su nombre es Titan X.
A todo el mundo sorprendió la aparición de una GTX 1080 que por mucho menos dinero mejoraba a la Titan del año pasado, así que había que hacer algo para solucionar esto. El remedio toma la nueva arquitectura Pascal e introduce 12GB de RAM en formato GDDR5X (50% más rápida) con un ancho de banda de memoria de 480GB/s.
La nueva Titan X es la GPU más potente construida por Nvidia, se trata de un nuevo chip gráfico denominado GP102 y en él hay lugar para 3.584 núcleos CUDA– 1,5GHz -. Son 12.000 millones de transistores en armonía para conseguir llegar a trabajar con un flujo de información de 11TFLOPS.
Se pondrá a la venta el próximo 2 de agosto y no será barata, nos pedirán por la versión de la casa unos 1.200 dólares. Estará disponible inicialmente en Europa y Estados Unidos, para llegar más adelante a los principales mercados asiáticos.
Desde el punto de vista de mercado, la nueva Titan no es una GeForce nueva, es un nuevo elemento de la familia Titan que intenta contentar a jugadores muy exigentes o a equipos de trabajo con necesidades muy altas en tareas de GPU, sin tener que arruinarse en el desembolso.