
Al bendecir las 50 nuevas unidades que utilizará el Comando Regional Cibao Central de la Policía Nacional, en igual cantidad de corredores en que ha sido dividida la ciudad, monseñor De la Rosa y Carpio manifestó que nada hacen los dominicanos con lamentar los hechos delictivos y de criminalidad que ocurren a diario en el país.
“Si nosotros solo nos dedicamos a maldecir la violencia, nos quedamos cortos y no resolvemos nada, esto (las nuevas unidades de la Policía) es un gran paso, es una solución al problema”, subrayó monseñor De la Rosa y Carpio.
Dijo que los vehículos y las personas que los utilizarán son importantes, por lo que le pidió a Dios que ilumine a quienes estarán en el peligroso servicio de preservar la integridad y la seguridad de los demás.
El prelado católico mostró su confianza de que con los nuevos corredores de patrullajes disminuirán los casos de atracos y asaltos contra los ciudadanos en Santiago.
En tanto, el ministro de Interior y Policía, licenciado José Ramón Fadul, al agotar un turno en el acto, celebrado en la sede del comando policial en la antigua base aérea, declaró que el Plan Integral de Seguridad Ciudadana que aplica el Estado está dando frutos positivos para la sociedad dominicana.
Precisó Fadul que en ese plan están involucrados desde el Presidente de la República hasta entidades gubernamentales y del sector privado, ya que la inseguridad y la violencia es un problema de todos.
Dijo que se están tomando acciones concretas para reducir las causas que dan origen a los hechos delictivos, como son el aumento del empleo, los préstamos a las medianas y pequeñas empresas, el Plan Nacional de Alfabetización “Quisqueya Aprende Contigo” y la reforma de la Policía Nacional.