Tras la solemne juramentación de Adriano Espaillat como primer dominicano que logra un puesto en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, en el Capitolio el pasado martes se ofreció una fiesta en la Organización de Estados Americanos (OEA), que estuvo amenizada por los artistas dominicanos Sergio Vargas, la legendaria merentuera típica Fefita La Grande, y el salsero Yiyo Sarante.
Los tres son figuras de la música criolla que son representados en la plaza estadounidense por la empresa de Vidal Cedeño, quien también se encontraba en la juramentación formal de Espaillat, y en la fiesta que luego se ofreció en honor del congresista.
En el Capitolio, específicamente en el Auditorium del Congreso, Sergio se convirtió en el primer dominicano en interpretar el Himno Nacional Dominicano, mientras que el de los Estados Unidos fue interpretado por la cantante María José Nolasco.
Fefita La Grande, al igual que Sergio, fue una gran atracción en la fiesta que se desarrolló en la OEA, auspiciada por el embajador Gedeón Santos, para el nuevo miembro de la Cámara de Representantes, quien fue juramentado por otra figura dominicana que ha trascendido en la sociedad estadounidense, el juez Rolando Acosta.
Otras personalidades que se encontraban en ambas actividades son el ministro de Industria y Comercio, Temístocles Montás; el senador del D-NY, Chuck Schumer; y los también congresistas Nydia Velázquez y Luis Gutiérrez.
Tanto Sergio y Fefita, como Yiyo Sarante, manifestaron su satisfacción por haber participado en los actos de investidura del primer miembro del Congreso Federal de los Estados Unidos de origen dominicano.
Vidal Cedeño se mostró sumamente emocionado y orgulloso de haber contribuido, con los artistas de su empresa, establecida en Nueva York desde hace más de 20 años, primero, a la realización del acto solemne de juramentación de Espaillat como congresista federal, y segundo a la gran fiesta que se le dedicó en la OEA.
Se recuerda que Espaillat, de 61 años, fue el primer inmigrante dominicano elegido a la legislatura estatal de Nueva York en el 1996, lo que se asume como el punto de partida para la diáspora asumir poder político en esa importante metrópoli.
Ahora, como dirigente del Partido Demócrata, también se convierte en el primer dominicano en ocupar un puesto en la Cámara de Representantes.