Ayer os contábamos que la Comisión Europea estaba concluyendo su larga investigación respecto a las supuestas ayudas fiscales a compañías extranjeras por parte del gobierno irlandés. Es una práctica similar a la que realizan otras empresas como Google, Amazon, Starbucks, Fiat Chrysler o Facebook, aunque el caso de Apple es especialmente llamativo al haber sido una de las primeras empresas estadounidenses en empezar a hacerlo y los muy bajos impuestos que ha pagado.
Finalmente la sanción a Apple va a ser muchísimo más elevada de lo que se esperaba, ya que hace unos minutos la Comisión ha anunciado que Apple tendrá que devolverle 13.000 millones de euros a Irlanda. La decisión la han tomado tras estimar que las ayudas de estado recibidas por la empresa han sido ilegales.
“La Comisión Europea ha llegado a la conclusión de que Irlanda otorgó ventajas fiscales indebidas a la empresa Apple por valor de hasta 13 000 millones de Euros”, dice la Comisión Europea en su nota de prensa. “Con arreglo a las normas sobre ayudas estatales de la UE, esta práctica es ilegal ya que ha permitido a Apple pagar muchos menos impuestos que otras empresas. Irlanda deberá proceder ahora a la recuperación de la ayuda ilegal”.
Irish tax rulings to Apple are illegal state aid. Effective taxation as low as 0,005 pct. #Apple has to repay up to €13 billion unpaid tax.
La comisaria Margrethe Vestager, responsable de la política de Competencia, ha declarado que los Estados miembros no pueden otorgarle ventajas fiscales selectivas a determinadas empresas, asegurando que es una medida ilegal que contradice las normas sobre ayudas estatales de la Unión Europea.
El fruto de dos años de investigación
Esta última investigación arrancó en 2014, y la multa corresponde a los impuestos que la empresa no ha pagado entre 2003 y 2014. Según la comisión, Apple consiguió pagar un tipo efectivo del impuesto sobre sociedades del 1 % sobre los beneficios generados en Europa en 2003, y este se fue reduciendo aún más hasta alcanzar el 0,005 % en 2014.
Lo que ha hecho Apple, y también muchas otras grandes empresas internacionales, ha sido registrar todas sus ventas en Irlanda en vez de hacerlo en los países en los que han ido vendiendo cada producto, evitando así los impuestos de estos países y limitándose a pagar el reducido impuesto que les exigía las autoridades irlandesas.
Según explican desde la Comisión Europea, este tratamiento fiscal selectivo de Apple en Irlanda es ilegal debido a las normas sobre ayudas estatales de la Unión Europea, ya que les concede una ventaja significativa frente al resto de empresas que cumplen con la normativa tributaria nacional.
Apple por su parte ha emitido un comunicado en el que se muestra confiada en que la medida será revocada, acusa a la Comisión Europea de estar esforzándose para reescribir la historia de Apple en Europa ignorando las leyes fiscales de Irlanda, y advierte que la sanción tendrá un profundo y dañino efecto en la inversión y la creación de empleo en Europa.
Tal y como recoge el Financial Times, desde el Ministerio de Finanzas de Irlandatambién se han mostrado partidarios de recurrir la decisión de la Comisión ante los tribunales europeos pese a ser el gobierno de aquel país el que recibirá el dinero de Apple, por lo que aún no podría estar escrita la última palabra sobre este caso.