Desde el 2011 Apple y Samsung están envueltas en una serie de demandas por infracción de patentes, y desde entonces hemos visto todo tipo de multas, acuerdos y apelaciones, esto mientras siguen pasando los años. Hoy Apple finalmente ha ganado una de esas batallas y Samsung tendrá que pagar cerca de 120 millones por haber copiado algunas características del iPhone.
Hoy el Tribunal Supremo de los Estados Unidos ha rechazado una nueva apelación por parte de Samsung, quien había sido acusado de usar patentes sin autorizaron pertenecientes a Apple. Dicha acusación tuvo su veredicto en 2014 condenando a Samsung a pagar 119.6 millones de dólares, y desde entonces ha ido pasando de tribunal en tribunal con el objetivo de ganar la apelación.
Un batalla menos, falta una
En este caso especifico, Samsung fue acusada de copiar características como el ‘slide to unlock’, el sistema de autocorrección y los ‘enlaces rápidos’, con los que el sistema identifica números de teléfono o direcciones en un texto para convertirlos en accesos directos a una acción o aplicación. Sólo esta última patente representaba 99 millones de dólares.
Desde el primer veredicto en 2014 por parte de una Corte Federal en San José, California, Samsung ha apelado en otros circuitos legales alegando que desde un inicio no se ha aplicado de forma correcta el procedimiento de patentes. En 2016 el caso llegó al Tribunal Supremo quien hoy le pone fin a todo esto al no aceptar una nueva apelación.
patente slide to unlock
Mientras que Apple no ha ofrecido declaraciones acerca de la decisión del Tribunal Supremo, Samsung ya ha salido a expresar su opinión:
“Nuestro argumento fue respaldado por muchos que creían que la Corte debería escuchar el caso para restablecer estándares justos que promuevan la innovación y eviten el abuso del sistema de patentes. Este fallo permitirá que Apple se beneficie injustamente de una patente inválida”.
Por otro lado, aún está pendiente otro caso de patentes entre ambas compañías, la cual tuvo su primer veredicto en contra de Samsung en 2012 condenándola a pagar 1.052 millones de dólares. Dicho caso también ha sido revisado en varias ocasiones provocando que la multa haya bajado a poco más de 400 millones. La audiencia final para este caso está programada para mayo de 2018, la cual pondrá fin a esta larga batalla legal entre ambas compañías.