Los menores indocumentados que ingresaron al país con alguno de sus padres no tienen derecho por ley a un abogado federal durante procesos de deportación, determinó hoy la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de California que rige el oeste del país, en una decisión que podría afectar los casos de miles de menores.
Los tres jueces que estudiaron el caso de un joven hondureño identificado como C.J.L.G., que llegó al país con su madre alegando escapar de la persecución de las pandillas, declararon unánimemente que la leyes federales no le garantizan el pago de abogados ante la corte inmigración.