Alejandro José Montero Cruz, a quien el Ministerio Público le acusa de tráfico ilegal tras encontrar varias armas de fuego en el allanamiento realizado en el apartamento que reside, aseguró que no tenía ningún vínculo ni relación con las personas señaladas como parte de la Operación Coral.
Dijo que el allanamiento realizado el pasado 24 de abril en su apartamento es porque está a nombre de Adán Cáceres Silvestre, principal acusado del entramado, pero que en los tres años que lleva siendo inquilino nunca ha tenido contacto con el mayor general, sino con la señora Honoris Soto, quien estaba apoderada para alquilarle el inmueble.
“Yo he decidido hablar frente a usted en el día de hoy para defender mi honor y mi dignidad como ser humano. Yo no tengo ningún tipo de relación ni vínculos con ninguna persona de este entramado”, indicó.
Aseguró que se ha graduado de Mercadotecnia magna cum laude, en la Universidad Católica de Santo Domingo, viniendo de una familia con valores, y que es una persona con principios, honesta, honrada, amigo y padre de familia.
“Yo no quiero ser víctima de ser arrastrado de tanta sensibilidad pública como esta. Yo no tengo ningún tipo de problemas en presentarme en cualquier tiempo de actos”, dijo antes de que uno de sus abogados solicitara libertad pura y simple para él.
Este jueves continúa el conocimiento de medida de coerción contra los implicados en la Operación Coral, en el que además de Montero Cruz y Adán Cáceres Silvestre, se encuentran la pastora Rossy Guzmán Sánchez, Tanner Antonio Flete Guzmán y Rafael Núñez de Aza.
