El dominicano Albert Pujols está cada vez más cerca de arribar a los 3,000 hits en las Grandes Ligas. Tras la serie ante los Astros, el primera base y bateador designado de los Angelinos amaneció el viernes con 2,994 imparables, a sólo seis de la prestigiosa marca.
Cuando Pujols llegue a ese hito, se convertirá en apenas el cuarto bateador en la historia de las Grandes Ligas con al menos 3,000 hits y 600 jonrones, uniéndose a Hank Aaron, Willie Mays y Alex Rodríguez. Pujols ocupa el puesto 32 en el listado de imparables, detrás del puertorriqueño Roberto Clemente, quien conectó 3,000 exactamente durante su carrera de Salón de la Fama.
El histórico hit debe de llegar en los próximos días, y aunque Pujols piensa en ello todos los días, el veterano insiste en que no es lo que más ocupa su mente cuando se está preparando para cada juego. Pero también sabe que 3,000 es un número especial, y se mostrará agradecido por el momento cuando finalmente ocurra.
Pujols’ 2,993rd hit ties game
Pujols’ 2,993rd hit ties game
00:42
24 de abr., 2018
“No quiero ignorarlo”, dijo Pujols esta semana. “Es algo de lo que todo el mundo está pendiente, incluso yo. Pero mi principal foco es tratar de ayudar a ganar a este equipo. Si me mantengo saludable, llegará un día de estos. Yo no me pongo presión. Sólo trato de hacer un buen swing, como he hecho con los otros 2,294.
“Tarde o temprano llegarán esos seis. Realmente no pienso en ello. Para mí es difícil enfocarme en esas cosas. Mi enfoque siempre ha sido ayudar a ganar a este equipo”.
Como Pujols históricamente ha tenido mucho éxito contra los Astros (les ha pegado 64 jonrones, incluida la postemporada, la mayor cantidad para jugador alguno, seguido por Aaron con 46 y Willie McCovey con 44), quizás hubiese encajado a la perfección que pegase el hit 3,000 esta semana en el Minute Maid Park, pero para suerte de los Angelinos y sus fanáticos, los Angelinos volverán a la acción el viernes en Anaheim.
En dicha jornada abrirán una serie ante los Yankees, parte de una estadía de seis juegos en casa, lo que deja abierta la posibilidad de que Pujols consiga el ansiado batazo frente a sus propios aficionados.
“Pienso que cuando pase, será un día bien emocionante”, reconoció Pujols. “Y espero que cuando ocurra, sea durante un juego que ganemos. Eso lo haría todavía más especial”.