SANTO DOMINGO.- El dominicano Al Horford mostró el gran nivel de su juego y fue la bujía en el cierre del partido para que los Celtics de Boston derrotaran este jueves en la noche 120-108 a los Warriors de Golden State para dar el primer golpe en la final de la NBA, que inició en San Francisco, Estados Unidos.
Horford estuvo fino desde el triple, anotando 6 de 8, dos de ellos en forma seguida para darle ventaja a los Celtics 111-103 a falta de menos de cuatro minutos para finalizar el partido y luego tomó un rebote defensivo y sacó la bola para un triple de Marcus Smart que colocó las acciones 114-103 a falta de tres minutos para concluir el tiempo regular el encuentro.
Al, primer quisqueyano en jugar una final de la NBA, terminó el encuentro con 26 puntos, seis rebotes y tres asistencias, para dejar una gran huella en su debut en esta instancia de la temporada, la cual le tomó 141 juegos de postemporadas para llegar.
Sobre su actuación el dominicano dijo tras el partido estar agradecido de estar en ese escenario.
“Estoy agradecido de Dios por vivir este momento”, dijo Horford, quien indicó que el desempeño del equipo en el último cuarto, cuando superaron a los Warriors 40-16, se debió al grupo que desde el banco mantuvieron a los Celtics a flote.
“El grupo que inició el último cuarto, fue el que nos prendió a la ofensiva y de ahí continúo todo”, destacó.
Sobre su desempeño de larga distancia dijo que aprovechó las oportunidades que les brindó la defensa de los Warriors y del siguiente partido, a jugarse el domingo, señaló que saldrán a darlo todo y ver que sucede.
Jaylen Brown fue una pieza de grande en la ofensiva de los Celtics, al colar 24 tantos, a los que agregó siete rebotes y cinco asistencias, siendo respaldado por 21 puntos de Derrick White saliendo del banco y 18 de Marcus Smart.
Jayson Tatum no estuvo en su mejor partido en ofensiva, pero se las arregló para terminar con un doble-doble de 12 puntos y 13 asistencias.
Stephen Curry tuvo un primer partido espectacular, en el que encestó un récord de seis triples en el primer cuarto de la final, para terminar con 21 unidades en los primeros 12 minutos de acción, en camino a concluir con 34 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias.
Klay Thompson fue limitado a 15 puntos, dejando a Andrew Wiggins como el segundo mejor hombre en la ofensiva de los Warriors con 20 unidades.