Un intenso aguacero caído en las últimas horas en Santiago de los Caballeros, provocaron la inundación de varios pasillos y localidades vitales del hospital regional universitario José María Cabral y Báez, el más importante de cientos de poblaciones de la región Norte dominicana.
En gran parte del centro de salud se vivieron momentos dificultosos, teniendo pacientes que ser evacuados hasta en carretillas, por la calamidad imprevista, y que en parte tiene su raíz en las reconstrucciones que no terminan y que datan desde casi seis años.
Las aguas afectaron dependencias sensibles del hospital, como la de consulta, emergencia y administrativa, en donde el personal casi se vio impotente por un “enfermo” muy difícil de manejar.
Un médico que solicitó no ser identificado, manifestó que, “esto se le agradece a la Oficina de Ingenieros Supervisora de Obras del Estado (OISOE), que ha sido incompetente en la reconstrucción, que todo hace indicar, dispone de un presupuesto infinito y no planificado”.