JUMA, Bonao.- La producción de arroz en República Dominicana se encamina a una transformación. Esto gracias a la producción de semillas de calidad y alto valor genético producidas en el país.
Mejoramiento genético en dos variedades del cereal
El ministro de Agricultura, Ángel Estévez, así lo destacó. Dijo que se ha logrado el mejoramiento genético en dos variedades existentes. Estas son, la Juma 67 y la Ámbar.
Permitirá aumentar en más de un 15 por ciento la producción actual de 6 mil 500 kilos por hectárea. Significa un gran paso para la producción del cereal.
El titular informó que hace dos años se inició en el país la producción de semillas con alto valor genético. La misma se lleva a cabo a través del proyecto Bioarroz.
Mayor rendimiento y competitividad
Busca aportar mayores rendimientos a los productores locales. Además, “nos permitirá ser competitivos en mercados internacionales”, precisó.
Hizo la afirmación durante un Día de Campo con cientos de productores, molineros y técnicos del sector. El ministro resaltó la unidad que existe entre autoridades y productores.
Indicó que este acercamiento y las buenas condiciones permitieron producir una cosecha record este año. Sostuvo que con ello mejoró la rentabilidad de los productores y se logró satisfacer la demanda nacional.
Revisión de los acuerdos con productores
“La unidad de los sectores productivos ha permitido el crecimiento de la agropecuaria en los últimos cuatro años. Logrando indicadores de un 10 por ciento durante el 2016. Este año se espera superar el 12 por ciento”.
Así mismo, expresó que se revisarán los acuerdos con los productores de semillas. Es para establecer un precio que permita a los pequeños productores ser rentables.
Bernardina Hernández (Doña Mora), agradeció en nombre de los productores arroceros. Pidió tanto a productores como molineros dar su apoyo para mantener esta estabilidad.
Nuevas variedades antes del 2020
El Proyecto Bioarroz se inició en 2014 con miras a buscar variedades que fueran más rentables. Al mismo tiempo, que permitieran mayor productividad en el sector arrocero.
Al 2017, el proyecto ha rendido sus frutos con la introducción de una nueva variedad y mejoramiento genético. Se espera introducir nuevas variedades antes del 2020.