SANTO DOMINGO NORTE. La Policía se opuso ayer a que una mujer que murió por causa de un accidente fuera velada en uno de los apartamentos de la Nueva Barquita, alegando que estaba en estado de descomposición.
Se generó una situación tensa donde hubo forcejeos con algunos agentes y hasta algunos disparos se hicieron para dispersar a la multitud que aunque que logró llevar el cadáver a pie a la casa, una hora después fue sacado por la Policía comandada por el general Máximo Báez Aybar, director regional de Santo Domingo Norte.
La gente insistía es que les dejaran velar el cuerpo de Julissa Castro, de 24 años de edad, que sufrió un accidente de tránsito el pasado sábado y falleció la noche del pasado jueves en el hospital Ney Arias Lora.
“La Policía fue hasta el hospital para que no la trajéramos aquí, que la enterraran de una vez, ellos querían que la enterráramos sin velarla”, explicó Franklin Peguero, pariente de la fenecida.
Informó que pretendían velarla en el multiusos, pero que alegadamente el Patronato de La Nueva Barquita le estaba cobrando RD$7,000.
Diario Libre intentó dialogar con una ingeniera y uno de los dirigentes del Patronato, pero les dieron la espalda a un equipo de este diario y de El Caribe, sin decir ni una palabra.
Posteriomente, el Patronato emitió un comunicado en el que explica ofrecieron hacerse cargo del carro fúnebre y de los servicios funerales que se harían, atendiendo al protocolo.
“Es importante destacar que por razones de salubridad y seguridad del cuerpo de fallecidos, no pueden ser velados en el conjunto habitacional La Nueva Barquita. Para estos fines, en las inmediaciones del proyecto, cubriendo estos servicios está la funeraria municipal”, explica el comunicado copia del cual obtuvo Diario Libre.