KABUL, 22 Mayo 2016 (AFP) – El líder de los talibanes afganos, el mulá Akhtar Mansur, murió en un ataque aéreo estadounidense en Pakistán, anunciaron este domingo los servicios afganos de inteligencia, mientras que los insurgentes mantenían un silencio total.
La muerte del mulá Mansur asesta un fuerte golpe al movimiento islamista, enfrentado a una dispersión de sus tropas, de las que algunos han desertado para unirse a las filas del grupo yihadista Estado Islámico (EI). El molá Mansur, a la cabeza de los talibanes desde el verano pasado, tras la muerte del fundador del grupo el mulá Omar, “murió ayer en un ataque de drones (…) en Baluchistán”, una provincia al suroeste de Pakistán, indicaron los servicios de inteligencia afganos. “Se le vigilaba desde hacía tiempo”.
Un miembro de la “Shura de Quetta”, el Consejo de Dirección de los talibanes afganos, contó a la AFP que no conseguía contactar al mulá Mansur desde el sábado por la noche. “No sabemos si le ha pasado algo grave o si apagó su teléfono móvil por miedo a un ataque”.
El bombardeo se llevó a cabo con varios drones de las fuerzas especiales estadounidenses en Pakistán, en una zona apartada “en el suroeste de la ciudad de Ahmad Wal”, según un responsable norteamericano. Según esta misma fuente, el jefe talibán murió “probablemente” en el ataque, autorizado por el presidente Barack Obama. Washington informó del ataque a Islamabad y Kabul una vez terminado, según un alto responsable de la Casa Blanca.
El ataque aéreo “destruyó totalmente” el coche en el que circulaban dos individuos, cuyos restos son “irreconocibles”, indicó a la AFP un responsable de los servicios de seguridad pakistaníes. Los dos cadáveres fueron trasladados a un hospital de Quetta, la capital de la provincia de Baluchistán, precisó otro responsable.