Nacida en Puerto Príncipe, Nakia Venant, de 14 años, estaba encerrada en el baño de la casa de sus padres adoptivos en Miami Gardens. Desbloqueó su teléfono, abrió su perfil de Facebook y comenzó a transmitir. En los primeros minutos nadie sospecharía que se trataría del registro de su propia muerte. Dos horas después, Nakia había muerto y el mundo lo había podido ver en vivo. Eligió una bufanda con la cual colgarse desde una puerta de cristal.
El Departamento de Niñez y Familia de Florida y la Policía de Miami Gardens investigan los hechos que condujeron a la pequeña a cometer semejante decisión. “Estamos horrorizados y devastados por las noticias sobre la muerte de esta joven niña“, señaló el secretario de la oficina de la niñez Mike Carroll.
“Haremos todo lo posible para apoyar a la familia y a todos aquellos que se preocuparon por ella para que comiencen a sanar de esta tragedia“, indicó Carroll y añadió que realizarán todas las investigaciones que contribuyan a entender qué pudo haber ocurrido con Venant. Para ello dispondrán de profesionales multidisciplinarios y todo tipo de ayuda psicológica con sus allegados más cercanos.
Eran las 3.03 de la mañana del domingo cuando Nakia murió, mientras sus padres adoptivos dormían. La jovencita colocó la bufanda en la puerta de cristal del baño y se colgó de ella, sin poder escapar de la trampa que había diseñado. Una amiga de Nakia intentó salvarla, pero no lo logró pese a haber llamado a los agentes de seguridad del condado. Al comunicarse con el 911 dio una dirección errónea a la cual asistieron los policías en busca de la víctima que continuaba transmitiendo en vivo.
Mientras la emision estaba online, la joven mantuvo conversaciones con amigos.
– ¿Me quieres más muerta?
– No, nunca digas eso.
– No quiero vivir más.
– ¿Qué ocurrió?
– Estoy cansada de que mi vida no tenga sentido. No quiero esto más.
Según sus familiares y amigos, Nakia era una joven con un gran nivel académico. Cientos de mensajes se han multiplicado en las últimas horas en su perfil de Facebook donde el video ya no está. “¿Por qué hiciste eso? Te amo para siempre. Vuela alto“, es uno de las tantas publicaciones que pueden leerse.
Dos semanas atrás, otro caso similar conmovió a la opinión pública norteamericana. Fue el suicidio que transmitió en vivo Live Katelyn Nicole Davis, una niña de 12 años de Cedartown, Georgia.