Adélio Bispo de Oliveira, de 40 años, es el autor confeso del atentado contra el candidato presidencial ultraderechista, Jair Bolsonaro, a quien hoy apuñaló en el abdomen durante un mitin de campaña en el municipio de Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais (sudeste), confirmaron fuentes oficiales.
Natural de Montes Claros, a unos 700 kilómetros de donde se produjo el ataque, Bispo de Oliveira se encuentra detenido en la sede de la Policía Federal de Juiz de Fora, mientras las autoridades intentan esclarecer el motivo del intento de homicidio.
Según confirmaron a Efe fuentes de la Policía Militarizada, De Oliveira tenía un curso de educación superior y parecía “mentalmente pleno y totalmente consciente de aquel acto que parece que fue premeditado”.
“Dijo inicialmente que no simpatizaba con Bolsonaro, pero con el transcurso de las investigaciones, probablemente, debe pasar más informaciones”, señalaron las citadas fuentes.
No obstante, el presidente de la Federación Nacional de los Policías Federales de Brasil, Luis Boudens, dijo a Efe que en el momento de su arresto De Oliveira “presentó un aspecto de un problema psicológico, e incluso llegó a decir, según testimonios que presenciaron los hechos, que la tarea era una misión divina”.
“Soltó esa frase en el momento que era conducido a la patrulla de la Policía, dijo eso y algunas personas lo escucharon”, comentó Boudens.
El ataque se produjo en la tarde de este jueves mientras el candidato ultraderechista, un nostálgico de la última dictadura militar que imperó en Brasil entre 1964 y 1985 y firme defensor de la liberación de armas, era llevado a hombros por uno de sus simpatizantes.
El aspirante ultraderechista fue hospitalizado y sometido a una cirugía, pues la estocada, al parecer, le alcanzó algunos órganos y no corre riesgo de muerte, según informaron sus familiares en redes sociales.
Fuentes de la Policía Militarizada señalaron que de Oliveira llevaba el arma blanca con la que acuchilló al aspirante presidencial “envuelta en una camisa” y se “fue aproximando hasta que tuvo la oportunidad y le alcanzó”.
Según esas fuentes, fue arrestado en el momento por un cabo de la Policía Militarizada y conducido a la sede de la Policía Federal, que ahora intenta trazar un perfil psicológico del agresor.
De acuerdo con Boudens, Bolsonaro era escoltado por cuatro agentes federales cuando se produjo el atentado, además de contar con el apoyo de agentes de las policías locales.
“Se está buscando la motivación, si hay un problema psicológico o si hay una motivación ideológica, todo eso ya está siendo investigado”, añadió.
“Hasta que los hechos principales sean esclarecidos se quedará en Juiz de Fora, si se esclarece toda la verdad, debe ser conducido probablemente a Brasilia”, completó.
Bolsonaro, con un largo historial de declaraciones machistas, homófobas y racistas, lidera los sondeos de opinión con un 22 % de los apoyos de cara a las elecciones del próximo 7 octubre, eso en un escenario sin el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción y cuya candidatura ha sido vetada por la Justicia.